Con la finalidad de acoger y proteger a las madres adolescentes, así como asegurar que sus hijos nacerán en las mejores condiciones, la Municipalidad de Arica firmó un convenio con el Programa Emprende Mamá y el Obispado de Arica, a través del cual traspasó 14 millones de pesos para el buen funcionamiento de ese proyecto.

El alcalde Waldo Sankán rubricó ese compromiso en representación del municipio, oportunidad en la que agradeció tener la oportunidad de “hacernos cargo de situaciones que nos permiten ofrecer nuestro apoyo y colaboración, a fin de que estas niñas no vean limitado su futuro”.

La firma del convenio se efectuó en la Sala Fundación del Edificio Consistorial, hasta donde llegaron el Obispo de Arica, monseñor Héctor Vargas; Mónica Hayes, en representación del Programa Emprende Mamá; Osvaldo Abdala, director de Desarrollo Comunitario (Dideco); y, Nidia Faúndez, encargada de la Oficina de la Mujer.

Sankán explicó que como muchas veces estas adolescentes “no tienen siempre un apoyo efectivo, lo que queremos es hacernos cargo de ese problema”.

El Programa Emprende Mamá, de acompañamiento a la adolescente embarazada, es ejecutado por el voluntariado Asociación de Damas Salesianas (ADS) y está dirigido a las madres adolescentes de sectores en vulnerabilidad social.

El proyecto tiene como objetivo el acompañamiento integral personal y grupal de las jóvenes que se encuentran en esta situación durante el embarazo, parto y post parto, así como en los primeros meses de lactancia.

Apoyo Municipal

El jefe edilicio enfatizó que es su deseo que las niñas que resulten embarazadas “tengan una orientación para poder tener a su hijo. Una vez que tomen esa decisión, que es la que queremos, que tal medida de ser mamá, de cuidar la vida de quien tienen en su vientre, tampoco les impida cumplir sus sueños y seguir estudiando”.

Esta red de apoyo que propuso Sankán se expresará a través de la Oficina de la Mujer de la Dideco, y en la práctica mediante guarderías infantiles, jardines o salas cuna que existen en los colegios municipales “para que así puedan seguir estudiando”.

“Creemos que es una realidad importante, ante lo cual tenemos que brindar un apoyo para que no sea un problema. Así que vamos a seguir apoyando. En este caso significa un aporte municipal de 14 millones de pesos, durante todo el año, de tal forma que tengamos profesionales con dedicación exclusiva, y de todas las redes municipales para hacerse cargo de esta realidad de muchas adolescentes”, explicó.

Para el alcalde Sankán, la firma de este convenio representa “un paso más en la labor social que hacemos como municipalidad. Nos sentimos felices de tocar un problema, que no tenía un apoyo muy importante hasta ahora”.

Al servicio de la vida

Monseñor Héctor Vargas afirmó que la firma de este convenio implica una importante ayuda a todo el trabajo que se está realizando con Emprende Mamá.

Destacó que el aporte que materializa la municipalidad “nos va a permitir no sólo continuar con este programa que atiende a niñas en comunidad, sino que también hacerlo de una manera mucho más integral”.

Aunque no informó de cifras, el obispo ariqueño aseveró que existe “un preocupante aumento de adolescentes embarazadas, por lo que decidimos dar una respuesta a eso y ver una forma de cómo nos hacemos cargo de ellas y poder acompañarlas con mucho cariño, afecto, prepararlas para ser mamás, que crezcan en su autoestima y sentirse acogidas”.

Explicó que cuando comenzaron el programa se informaron de la situación en el Consultorio Amador Neghme, donde sólo en el primer semestre de 2009, al menos cien adolescentes embarazadas estaban siendo atendidas.

Argumentó que como Iglesia “estamos haciendo lo que podemos, en la medida de nuestras posibilidades. Esta es una ayuda. Pero hay que preocuparse de estas chiquillas, para que se vayan preparando para ser mamás, esperar con mucho cariño y amor al niño que viene, y tener todos los apoyos necesarios. Es una tarea muy bonita al servicio de la vida”.

Sumar profesionales

Mónica Hayes, en representación del Programa Emprende Mamá en Arica, destacó que este convenio les ayudará a crecer como proyecto, a través de la contratación de profesionales “para que trabajen en forma exclusiva con el programa”, ya que hasta ahora sólo contaban con la colaboración de voluntarias.

La idea es ayudar a la adolescente en la parte afectiva, educativa y formativa, para lo cual se necesita el trabajo de profesionales, como psicólogas, matronas y asistentes sociales.

Manifestó que en Arica se han encontrado con adolescentes embarazadas de 13 años, casos en los que se requiere de “todo el apoyo emocional para que puedan seguir con su embarazo más tranquilas, acompañándolas durante el parto y una vez que nace su bebé, hasta cuando tiene casi un año”.

Invitó a las personas interesadas en sumarse a ese voluntariado para que se acerquen a sus oficinas ubicadas en la Vicaría de la Pastoral Social de la Diócesis de Arica, en Avenida Santa María con Juan Antonio Ríos. “Siempre nos faltan voluntarias. La idea es formar más grupos este año. En este momento tenemos 18 voluntarias y 50 niñas en el programa”, sostuvo.

Fuente: Comunicaciones Arica
Arica, 11-01-2011