Alrededor de doscientos jóvenes se reunieron la noche del sábado en la Plaza de Armas de Copiapó, en la Fiesta del Espíritu, actividad que puso término a la Misión Juvenil Nacional 2005.

Los asistentes, en su mayoría misioneros, comenzaron la celebración animados por el grupo juvenil del Santuario de Nuestra Señora de la Candelaria; luego bailaron, cantaron y compartieron momentos de oración. También escucharon el cálido saludo que les envió el Obispo, Monseñor Gaspar Quintana, motivándolos a ser misioneros y agradeciendo el trabajo voluntario y entusiasta que realizan dentro de la Iglesia.

Estuvieron presentes delegaciones de las parroquias San Vicente de Paul de Caldera, Catedral, San Pablo Apóstol, San José Obrero de Copiapó, N. Sra. ds Loreto de Tierra Amarilla, Stma. Trinidad, entre otras, además de los colegios de Iglesia. A ellos se sumaron jóvenes y público en general, que a esa hora transitaban por la Plaza de Armas.

La fiesta incluyó música andina, pop y electrónica, presentaciones de jóvenes de gruidos parroquiales, oraciones y mucha alegría.

Esta fue la primera versión de esta fiesta, organizada por la Pastoral Juvenil de Copiapó, y según sus organizadores, se espera que se convierta en una tradición que se realice todos los años, ya que es una instancia en que la juventud cristiana católica muestra públicamente la alegría y el gozo de vivir la fe en Cristo.

Fuente: Comunicaciones Copiapó
Copiapó, 29-05-2005