Tal conmemoración, en la que además participaron delegaciones de colegios diocesanos, tuvo un carácter simbólico al recodar a San Alberto Hurtado, oportunidad que aprovechó el obispo para agradecer por el santo patrono, recordando que “él iluminó la conciencia de Chile hace muchos años y que sigue hoy día preguntándonos ¿es Chile un país católico?, pero todo indica que aún estamos en deuda, pues queremos vivir como un país católico, pero todavía estamos lejos de alcanzar la verdadera solidaridad”, indicó el pastor diocesano.

La eucaristía fue una instancia más, que forma parte del programa del Mes de la Solidaridad que la Iglesia en Chillán ha estado impulsando durante agosto, bajo el lema “En el Año de la Misericordia: Una nación, más que la tierra, es una misión que cumplir”, que -siguiendo la invitación del Papa Francisco para este año- invita a la comunidad a vivir este mes inspirado en la figura de San Alberto Hurtado, santo chileno que siempre luchó por la justicia social.

En su mensaje el obispo invitó a “vivir la solidaridad asumiéndola como una actitud permanente de vida, para que seamos personas solidarias, en la familia, en el trabajo y en otros ambientes, más allá de los actos concretos que son muy importantes hacia quienes lo necesitan”, subrayó agradeciendo la importante labor de las instituciones de voluntariado que repletaron la Catedral de Chillán.

Cabe recordar que el Mes de la Solidaridad fue instaurado por la Iglesia chilena en virtud de la proyección del amor fraterno dentro de nuestra sociedad, a la luz de la vida y obra del Padre Alberto Hurtado, quien falleció el 18 de agosto de 1952. De ahí que en el año 1994, esa fecha haya sido instaurada por el Congreso como el Día Nacional de la Solidaridad.

Llamado a valorar a los adultos mayores
La celebración de este 18 de agosto, comenzó al mediodía en Chillán Viejo, luego que el equipo del Depto. de Acción Fraterna, ofreciera un almuerzo a los adultos mayores que son atendidos en la Casa de Acogida “Don Adrián”, junto al párroco Fernando Varas y al director del área social del Obispado, padre Héctor Bravo, quien hizo un llamado a “darles en lugar que corresponde en nuestra sociedad, como ocurre en otras culturas. Esta experiencia se traduce en redescubrir y valorar a los adultos mayores, y qué mejor que en esta casa de acogida donde existe una estructura digna para los abuelitos”, sostuvo.

Cabe recordar que la semana pasada, durante la noche del martes 9, el obispo dio el vamos al Mes de la Solidaridad, visitando a personas en situación de calle que pernoctan en distintos puntos de la ciudad. Y el viernes 12, visitó a los enfermos del Hospital Herminda Martín. El programa continuará este viernes 19, con un encuentro con los trabajadores para celebrar los 35 años de la Pastoral Laboral del Obispado de Chillán.

Fuente: Comunicaciones Chillán
Chillán, 18-08-2016