Al respecto, el vicario de la Zona del Maipo, padre Rodrigo Magaña, que está coordinando este servicio, señala que el objetivo es “vivir la caridad reforzando el acompañamiento, que ya realizan diáconos y sacerdotes en los cementerios. Labor especialmente compleja en este tiempo de la pandemia. Sin duda, esta pastoral que siempre ha realizado la Iglesia, se vuelve hoy especialmente relevante”.

Normalmente los cementerios ofrecen este servicio con diáconos coordinados por los propios cementerios. Pero al constatar que no dan abasto, se formaron equipos de sacerdotes voluntarios para acompañar a los deudos en estos difíciles momentos.

“Es muy doloroso ver a familias que por estar sus familiares en hospitales no han podido despedirse como quisieran de ellos. Más aún cuando hay familias que no pueden acompañar por estar ellos mismos enfermos. En este momento, los cementerios permiten un número muy reducido de personas, en general el protocolo es que al llegar a la sepultura se desciende inmediatamente el féretro. Y es entonces cuando se puede realizar una breve oración litúrgica de responso, que es un signo potente del amor de Dios, que sostiene a los deudos a través de la Iglesia, representada en sus ministros”, expresa el padre Rodrigo Magaña.

Este servicio es gratuito y se presta para todo tipo de fallecidos, ya sea por Covid-19 o por otra razón. Para ello, se ha establecido un equipo de ministros y teléfono de ayuda, destinado a apoyar el servicio religioso en cementerios durante la pandemia. El objetivo es responder a la gran demanda de sepultaciones que hay en los cementerios y de personas que quieren un responso. El teléfono para solicitar directamente este servicio es el +569 79804860​. Quién reciba la llamada, redireccionará el contacto a un sacerdote o diácono del equipo para acompañar a la familia del difunto y hacer la oración fúnebre. También se puede escribir a comunicaciones@iglesiadesantiago.cl

Fuente: Comunicaciones Santiago
Santiago, 09-07-2020