En el Santuario Nacional de Maipú optaron por innovar y celebraron la Solemnidad de la Inmaculada Concepción con una automisa para mantener la distancia social y evitar contagios. Hasta la explanada del Templo Votivo llegaron 50 vehículos cumpliendo todas las medidas sanitarias vigentes, en los que sus ocupantes animaron la fiesta con globos y con el sonido de sus bocinas. Esta Eucaristía se transformó en una oportunidad de reencuentro entre los fieles y la patrona de Chile, ya que en el mes de julio la celebración de la Virgen del Carmen se debió hacer completamente online.

La celebración fue presidida por monseñor Cristián Roncagliolo, obispo auxiliar de Santiago, quien reflexionó sobre las cualidades de la Virgen: “Es purísima, es sin mancha, es llena de gracia, y es disponible totalmente al llamado del Señor. Cuando acogemos en nuestro corazón esta alegría gozosa de María en todas sus cualidades, ciertamente somos interpelados a nuestra vida cristiana en cómo poder vivir intensamente una espiritualidad al modo de María”.

Monseñor, además, se refirió al momento actual: “En este día Santo, en que el mundo entero se vuelca a celebrar a la Virgen María en tiempo de pandemia (…) queremos honrarla a través de las redes sociales, presencialmente con aforos muy limitados, y en tantos y tantos lugares. (…) En este día de gracia pidámosle a nuestra Madre, que nos anime en la fe, en la esperanza y en la caridad, para que en medio de un tiempo difícil podamos vivir con esperanza las promesas del Señor, porque sabemos que en María la promesa ya está cumplida”.

La automisa contó con el apoyo logístico de la municipalidad de Maipú y con la presencia de su alcaldesa, Cathy Barriga, en el templo. La autoridad municipal agradeció la instancia de encuentro: “Me emociona estar aquí con todos ustedes y que traspasemos esta hermosa energía a través de las redes. (…) Agradezco la posibilidad de estar acompañándoles y los invito a no bajar los brazos, a ser responsables, a ser solidarios y a pensar que todos podemos estar hoy día expuestos y viviendo momentos difíciles”.

El padre Raúl Arcila, rector del Santuario, cerró la celebración agradeciendo a quienes la hicieron posible; a los trabajadores del Templo, a Radio María, a monseñor Roncagliolo y al equipo que transmitió por streaming. Además, hizo un llamado a la responsabilidad: “Debemos respetar las normas sanitarias, para vencer este virus que nos transformó la vida”.

Fuente: Comunicaciones Santiago
Santiago, 08-12-2020