En la fiesta de la Visitación de María Santísima, reunidos por plataforma Zoom, el voluntariado de unidad católica de acompañamiento espiritual del Hospital Regional Dr. Juan Noé Crevani, de la ciudad de Arica; celebraron catorce años de entrega y desinteresado servicio al Cristo sufriente, siendo la primera unidad hospitalaria creada en regiones para el acompañamiento espiritual y la segunda a nivel nacional. Celebración de la Santa Misa que estuvo presidida por el Obispo de la Diócesis, Mons. Moisés Atisha, sumándose los distintos voluntarios, asistentes de la salud, y familiares.

En sus palabras, Monseñor expresó a los presentes que al celebrar un aniversario más de una actividad pastoral, “no nos conformamos en hacer una marca en nuestro diario de vida, celebrar un año más de un servicio pastoral es reconocer todo lo que el Señor ha ido reconociendo a través de la generosidad de ustedes tienen diariamente”.

VOCAE (Voluntariado Católico de Acompañamiento Espiritual) realiza su misión en el encuentro con el enfermo haciendo de esta unión un momento místico con familiares preocupados y cansados, con los profesionales de la salud para potenciar una cultura más sensible frente al dolor, al sufrimiento, a la agonía, a la muerte, al duelo y a la defensa de la vida. Hermosa labor que realizan, llevando la luz de Cristo entre el carente de salud y familiares desesperados, dando siempre esperanza en medio de la oscuridad del sufrimiento que a diario se vive en medio de los pasillos del recinto hospitalario.

En su Homilía, el Obispo exhortó a la luz del evangelio: tres acciones que iluminan la espiritualidad que han ido cultivando, y “que es la fuente de renovación cotidiana en este servicio: las hace María Santísima: partió sin demora, al conocer una necesidad. Quien quiera acompañar tiene este resorte interior, la de partir al encuentro con el corazón y las manos abiertas para acoger. El evangelio es salir con rapidez. Segunda acción, la que hace Dios con nosotros, socorrió a Israel; no es un Dios que espera las ofrendas, sino es el que se coloca al servicio de quien lo necesita. Tercera acción que realiza de nuevo María, permanecer. No solo salir y socorrer, sino que también permanecer, hacer camino con quien nos hemos cruzados en su necesidad de ser acompañando en la debilidad de la propia necesidad”.

Enfatizó Monseñor Moisés Atisha que las tres acciones (Partir-Socorrer-Permanecer) hace la figura de un buen discípulo del Señor, “si repetimos estas tres acciones en nuestra labor pastoral, sin duda alguna es el mismo Jesús que sale del Padre que socorre en nuestra necesidad y que permanece en la iglesia regalándonos su espíritu”.

Como ofrenda, además del Pan y del Vino, el voluntariado puso a total disposición una significativa ayuda solidaria, quien se las ofrecieron como donación a las autoridades hospitalarias para el “cristo sufriente”. A saber, 2432 pañales, 267 sabanillas, 136 protectores de camas, 160 apósitos, 7 camisas para dormir, 102 útiles de aseo personal. Todo en unidad de apoyo para quienes se encuentran hospitalizados.

Resguardando el debido distanciamiento, la plataforma zoom no fue dificultad para encontrarse, celebrar y ofrecer juntos la vida que realizan con las nuevas exigencias que la pandemia nos ha llevado adelante. Catorce años de entrega que se han traducido en horas de desinteresado servicio y desafío de continuar una labor que sale de nuestras comunidades para realizar una pastoral de frontera, frente al dolor y la esperanza.

Fuente: Departamento de Comunicaciones San Marcos de Arica.
Arica, 02-06-2021