“Nuestro auxilio es el nombre del señor (salmo 123) … Así reza el lema episcopal de Monseñor Guillermo Vera Soto, Pastor que, en fidelidad al Papa Francisco y a la Iglesia, inicia su camino rumbo a la Diócesis que camina en Rancagua”.

Así se daba inicio, a eso de las 19:00 horas, a esta eucaristía de despedida de Monseñor Guillermo Vera en la Diócesis de Iquique. Donde, como Iglesia diocesana de la región de Tarapacá, rogamos también en ésta Misa, por su ministerio, para que, con la fuerza del Espíritu Santo, pueda responder con generosidad a los nuevos desafíos, no solo en nuevo territorio, sino también sabiendo descubrir los nuevos signos de los tiempos, en donde nos toca anunciar con más fuerza la Buena noticia del Evangelio.

La celebración estuvo presidida por el propio Obispo Vera, en compañía de los Vicarios Diocesanos, Guillermo Fajardo Rojas, y el Padre Javier Sáez, los cuales encabezaron esta misa para toda la comunidad diocesana de Iquique.

Posterior a las lecturas, el Salmo, y el Santo Evangelio, el aún obispo de la diócesis de Iquique, quiso entregar su último mensaje para toda la región de Tarapacá. El cual inició recordando sus comienzos en el ministerio sacerdotal en la localidad de Melipilla, hasta su nombramiento en el año 2003 como obispo, y su posterior traslado nuestra diócesis. Algo nuevo y desconocido para él, tanto por su cultura, su fe popular, y fervor hacía sus tradiciones.

Siguiendo con su mensaje, agregó que: “Junto al trabajo diario, al igual que a cada Iquiqueño, marcaron mi vida la celebración anual de la Virgen en La Tirana, de San Lorenzo en Tarapacá y las distintas celebraciones patronales en los diferentes pueblos que jalonan esta geografía, marcan el ritmo del año de sus hijos e hijas con sus hermosas expresiones de fe”.

“Marcó mi vida como obispo, la visita que el 18 de enero del 2018 realizó el Papa Francisco a nuestra ciudad. El hecho de que el Vicario de Cristo, el sucesor de San Pedro nos haya visitado es algo que no podemos olvidar, vino para confortarnos en la fe, animarnos en la esperanza y potenciarnos en la práctica de la caridad”. Agregó Monseñor Vera.

También tuvo palabras de agradecimiento para los diferentes grupos y movimientos de la diócesis, Pastoral Social Caritas, Pastoral de Migrantes, de la Salud, y tantos otros que hicieron de esta región una iglesia viva y activa.

Para finalizar, enfatizó: “Por todo lo anterior y por tantas experiencias vividas doy gracias a Dios y a ustedes. Parto llevándolos en mi corazón y confió poder llegar a la zona central llevando en mi interior: el calor y la luz del desierto, el ritmo de los bailes y la música que hacen la vida cantar y el agitar constante del mar que nos invita a trabajar con ilusión y entrega hasta que lleguemos a la playa definitiva. Gracias por todo”.

Reconocimiento:

Posterior al acto de comunión, La hermana Alana de la congregación Fraternidad el Camino, y el Sacerdote Juan Pablo Álvarez de comunidad de San José de Iquique, le entregaron un mensaje de agradecimiento a nombre de todos los sacerdotes y religiosas de la Diócesis de Iquique.

Consiguiente a ello, se le entregó un Galvano en acto de gratitud por estos 7 años de pastoreo y servicio a nuestra comunidad. También, se hizo entrega de un reloj de pared artesanal, que simbolizaba nuestra cultura y fe como tarapaqueños.

Para finalizar, Monseñor Vera, también tenía un regalo para cada Parroquia y comunidad de nuestra región, el cual fue recibido el párroco de cada comunidad.

Cabe mencionar, que toda persona presente en la ceremonia, contaba con ambas vacunas, y fueron posicionadas de tal manera que se cumplieran con todos los reglamentos y protocolos sanitarios.

Si quieres vivir nuevamente la ceremonia de despedida de Monseñor Vera, te dejamos a continuación el video completo.

Fuente: Comunicaciones Iquique
Iquique, 10-07-2021