Familia en misión llega desde Francia para servir en la Iglesia de Concepción

Familia en misión llega desde Francia para servir en la Iglesia de Concepción

¿Qué mueve a una familia a dejarlo todo y salir de su país para ponerse al servicio de la Iglesia? ¿Te has planteado dejarlo todo por el Señor y por los hermanos? En esta nota te contamos acerca de una familia de franceses que tomó esta decisión para ponerse al servicio de la Iglesia de Concepción.

 
Miércoles 17 de Noviembre de 2021
Se trata de Paul Cruse, su esposa Marie-Liesse y sus tres hijos: Agathe de siete años de edad, Henri de cinco y Jean de tres años. Esta familia de cinco integrantes decidió “hacer una cosa un poco loca” y dejar su trabajo, a sus familiares, a sus amigos y trasladarse a Chile.

Paul Cruse relata que desde hace ocho años que con su esposa tenían la voluntad de hacer algo para los otros, pero que no habían tenido ni el tiempo ni la ocasión de hacerlo. Pero en diciembre de 2020 tomaron la decisión y se pusieron en contacto con Fidesco.

Fidesco es una organización católica de solidaridad internacional, que envía voluntarios, que tengan espíritu de servicio y el deseo de ser testigos de la esperanza, a diferentes países. De acuerdo a lo dado a conocer por la asociación, nació como una iniciativa de la Comunidad de Emmanuel, “para responder al llamado de los Obispos de las iglesias del ‘sur’, que buscaban apoyo para distintas obras sociales y de desarrollo humano y social llevadas a cabo por iniciativa de la Iglesia”.

Paul Cruse señaló que conocen a Fidesco muy bien, pues tienen familiares que forman parte de la Comunidad de Emmanuel, y afirmó que aunque sentían un poco de aprensión al inicio de la misión, quieren salir de sí mismos y “hacer una acción para los otros” y conocer a la gente local, a los habitantes de la ciudad de Concepción “y del barrio donde vamos a trabajar”.

Cuando se pusieron en contacto con Fidesco firmaron una “hoja en blanco”, en la que sólo se especificaba que toda la familia estaba disponible para la misión durante dos años. Luego, de acuerdo a su perfil “y las necesidades de la Iglesia y las asociaciones locales que necesitan misión”, Fidesco decidió enviarlos a Chile.

Esta familia llegó a Santiago y debió permanecer en cuarentena. Paul Cruse dijo que el padre de una amiga de Francia, Serena, los ayudó tras su llegada y organizó todo para que pudiesen cumplir con su periodo de aislamiento.

Su llegada a Concepción está programada para la tarde de este miércoles y se quedarán cerca de un mes en Casa Betania, tras lo cual definirán junto al Arzobispo de Concepción, Monseñor Fernando Chomali, cuál será “nuestro trabajo y nuestra misión”.

Los invitamos a darles la bienvenida y a tener presente en sus oraciones a esta hermosa familia que lo dejó todo para ponerse al servicio de Dios y del prójimo.

Fuente: Comunicaciones Concepción
Concepción, 17-11-2021