El sol brillaba en lo alto, una brisa amenizaba el ambiente, los Bailes Religiosos tras dos años volvían a sus posiciones y los peregrinos se congregaron para dar testimonio de su fe durante este domingo 9 de enero en el Santuario El Niño Dios de Sotaquí. Y es que con el objetivo de otorgar el espacio que los feligreses se merecen, la organización de la Fiesta decidió efectuar una jornada presencial, garantizando el distanciamiento social y aforo limitado.

Quienes participaron de la ocasión agradecieron la iniciativa, especialmente los habitantes de Sotaquí, porque “fue bonito ver tanta gente, extrañábamos esta fiesta y de la forma que se organizó se ve más religiosa, permitiéndonos estar más cerca de la sagrada imagen, para rogarle por la lluvia y que interceda por nosotros en medio de la pandemia, para que mantengamos la salud”, destacó Giovana Rivera, vecina del sector.

Durante la jornada principal, el Arzobispo René Rebolledo Salinas presidió la Eucaristía Solemne, que se volvió a celebrar en el tradicional sector Los Paltos. Durante la Misa, estuvo acompañado del Rector del Santuario y párroco de la comunidad, P. José Antonio López, sacerdote que agradeció “a las personas que han participado en esta Fiesta muy especial. La gente se ha cuidado, ha manejado el distanciamiento social aún en medio de la multitud. Ha habido mucha participación de los feligreses y peregrinos, cada uno con su mascarilla y alcohol gel. Doy gracias a Dios porque nos ha favorecido en esta celebración. Va a ser difícil repetir esta fórmula, debido a la variante del virus que está entrando a muchos países, tenemos que ver con una mirada muy crítica lo que está pasando en Europa y ojalá no pase en Chile, pero no es posible adelantarnos y decir que para la Fiesta Chica en septiembre ocurrirá de la misma manera”.

Posterior a la celebración eucarística, las sagradas imágenes de la Virgen del Carmen y El Niño Dios de Sotaquí recorrieron las calles del pueblo, en lo que fue la Solemne Procesión, animada por Bailes Religiosos y rezos de los peregrinos.

Juana Tabilo, proveniente de Ovalle, comentó que cada año visita el Santuario, pues “es una necesidad venir a ver al Niño Dios, por lo que ahora venimos a pedirle por nuestros familiares y toda la gente que lo necesita”, expresó emocionada.

En tanto, Miguel Araya, vecino de Nueva Aurora, explicó que su motivación para participar de la celebración fue “pedir por todo el pueblo, para que nos proteja de la pandemia y especialmente nos ayude en la sequía que sufrimos. Mantenemos la fe firme, a pesar de todo. Le pido me siga dando vida y salud, pues mientras la tengamos seguiremos haciendo este sacrificio”.

La jornada finaliza este lunes 10 de enero, con la subida de las imágenes en la capilla del lugar, a las 20:00 horas.

Fuente: Comunicaciones La Serena
La Serena, 10-01-2022