Con el objetivo de acercar más la figura del primer Obispo de la Diócesis de Osorno a esta porción del pueblo peregrino en nuestra Iglesia local, y motivar e incentivar que permanezca viva la memoria del Venerable Siervo de Dios que continúa sirviendo a la causa del Evangelio.

Los peregrinos iniciaron su viaje a las 8.30 horas, camino a la parroquia dedicada a San Bernardino en Quilacahuín, donde el padre Pedro Kliegel explicó detallada y claramente la influencia bizantina que tanto motivó a monseñor Francisco Valdés en cada una de las cruces que pintó y que hoy, algunas de ellas se encuentran en el centro de distintas capillas y parroquias de nuestra Iglesia diocesana.

Así mismo, los presentes, también en cada una de las otras cuatro comunidades recorridas: la parroquia Sagrada Familia de Río Negro, la Capilla San Nicolás de la Flüe en Hueyusca, San Pedro y San Pablo en Rahue Alto y la Capilla Espíritu Santo en el sector centro de Osorno, se mostraron atentos, alegres, interesados en aprender e impresionados en cada una de las intervenciones del sacerdote diocesano, quien en sus relatos dejó ver la gran espiritualidad que desde el amor a Jesús vivió monseñor Valdés en su apostolado, lo que plasmó también en sus obras artísticas.

Al finalizar la peregrinación denominada: “Obras artísticas de Monseñor Francisco Valdés”, el obispo de la diócesis de Osorno, Jorge Concha Cayuqueo, expresó su alegría por la experiencia vivida, y destacó que el padre Kliegel durante la peregrinación “nos mostró el interés de monseñor Valdés por la vida contemplativa. También nos dijo que la oración, la contemplación, y el configurarse mucho con el Señor Jesús, son algunos aspectos muy fuertes en la espiritualidad del obispo Valdés, y esas características, las plasmó en sus pinturas”.

“Por eso la explicación que el padre Pedro nos dio durante nuestro peregrinar fue verdaderamente enriquecedor: Yo no conocí personalmente a nuestro primer obispo, y con esto uno se acerca a la persona, pero no solo con sentimientos sino con conocimientos, y a eso nosotros le sumamos el corazón”, señaló.

También dio gracias a la gente que participó en esta jornada, a quienes lo organizaron y al padre Pedro “porque ha sido un verdadero retiro, un espacio de formación, para la oración y realmente fue una jornada de vida comunitaria”.

Cabe destacar que las explicaciones que entregó el padre Pedro Kliegel de cada una de las Cruces que pintó el Venerable Siervo de Dios, pueden leerlas como dato adjunto al pie de esta nota. “Es una pequeña mirada al corazón de un pintor, a un obispo que por medio de sus pinturas trató de guiar a su pueblo. Eso es un don que él tenía, y ojalá que ese don vibre en nosotros. Entonces las pinturas nos hablarán”

Fuente: Comunicaciones Osorno
Osorno, 13-01-2022