Conocida la noticia del sensible fallecimiento del papa Benedicto XVI el pasado sábado 31 de diciembre de 2022, el Arzobispo René Rebolledo Salinas se dirigió al personal consagrado y a los feligreses de la Arquidiócesis, solicitándoles encomendar al difunto papa Emérito en las santas Misas de las parroquias y comunidades hasta el jueves 5 de enero, día en que el Papa Francisco presidirá la misa de exequias en la Plaza “San Pedro”.

En su comunicado el Arzobispo recordó las palabras que pronunciara el papa Benedicto, apenas concluido el Cónclave que lo eligiera Sumo Pontífice: “Queridos hermanos y hermanas: después del gran Papa Juan Pablo II, los señores cardenales me han elegido a mí, un simple y humilde trabajador de la viña del Señor. Me consuela el hecho de que el Señor sabe trabajar y actuar incluso con instrumentos insuficientes, y sobre todo me encomiendo a vuestras oraciones”.

Luego, expresó: “Hemos acompañado al papa Emérito Benedicto XVI con nuestra oración diaria durante los años de su pontificado –especialmente en las celebraciones eucarísticas-, también durante su enfermedad y ahora en la despedida. El Señor sabrá recompensarlo por su entrega generosa a Él y a la Iglesia”.

Consultado el Arzobispo por el sensible fallecimiento del papa Emérito manifestó: “Él fue una bendición para la Iglesia, un gran Pastor. Hombre sabio y de profunda humildad. Ha sabido guiar con acierto la Iglesia en momentos complejos y difíciles. Sin duda, de su Magisterio nos seguiremos enriqueciendo cada vez más. Él ha aportado con sus grandes capacidades y talentos también a la sociedad marcada por los cambios culturales en todo orden”.

Fuente: Comunicaciones La Serena
La Serena, 03-01-2023