Diócesis de Chillán agradeció y despidió al padre Juan Carlos Rodríguez Arias

El sacerdote falleció la madrugada de este lunes

Diócesis de Chillán agradeció y despidió al padre Juan Carlos Rodríguez Arias

Las comunidades en donde sirvió llegaron hasta la Catedral de Chillán para recordar estos 45 años de entrega y servicio.

 
Miércoles 25 de Enero de 2023
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La mañana de este miércoles 25 de enero, la Diócesis de Chillán despidió al padre Juan Carlos Rodríguez, quien partió a la Casa del Padre la madrugada de este lunes en Chillán. La misa estuvo presidida por el obispo de Chillán, padre Sergio Pérez de Arce, quien agradeció el servicio que el padre Juan Carlos prestó en la Diócesis por más de cuarenta años.

Concelebraron el vicario general padre Patricio Fuentes y el vicario pastoral padre Rodrigo Uribe. A ellos se sumó la casi totalidad del presbiterio de San Bartolomé, la familia del padre Juan Carlos y representantes de los lugares en donde sirvió, entre ellos, San Gregorio. Coihueco, Quillón y Pinto, entre otros.

La homilía estuvo a cargo del padre Patricio Fuentes, quien recordó los hitos más importantes del servicio que el padre Juan Carlos entregó a la Diócesis de Chillán. “Él fue imagen de ese padre bondadoso y compasivo, como un padre bondadoso con sus hijos. Nació en 1942 y por 45 años sirvió en la iglesia de Chillán. Recién ordenado comenzó como vicario en Coihueco, luego en Bulnes; siguiendo como párroco en Quillón, Pinto, Ninhue, San Gregorio. Los últimos años de su vida, y mientras la salud se lo permitió, estuvo en la Parroquia San Pablo. Fue por muchos años parte del equipo vocacional de la Diócesis, gran parte de los sacerdotes que estamos aquí fuimos acompañados por él”, recordó.

“Siempre quiso dar a conocer a Jesús, acompañando la vida del Pueblo de Dios. El padre Juan Carlos ha sido un hombre y sacerdote justo, imagen de las manos bondadosas de Dios. Sus manos de sacerdote dieron la primera comunión, consolaron y animaron en noches de dolor, bendijeron y perdonaron, transformaron el pan y el vino en el cuerpo y la sangre de Jesús, y se unieron intercediendo por tantos. Manos que a muchos nos levantaron con la misericordia de Dios, cuando pecadores, acudimos en busca de la reconciliación”, agregó.

Por último, el padre Patricio dijo que “no fue un sacerdote de grandes planes pastorales, pero nos mostró la auténtica sabiduría, la que es propia del evangelio, la que viene de Dios. El Pueblo de Dios así lo ha reconocido estos días de su velatorio haciendo memoria de su vida. Tres son las características que más se han repetido: fue sencillo, sin complicaciones, compartiendo la vida de las personas sencillas, con los campesinos, riéndose con el buen humor que lo caracterizaba. Fue un sacerdote disponible para enfermos y necesitados que siempre encontraron en él la acogida; en los últimos años, su casa siempre estuvo abierta para acoger a quien buscaba una palabra de alieno y el bálsamo de la misericordia de Dios. Por último, fue un hombre alegre, su sonrisa ha quedado grabada en todos los que hemos compartido con él la vida. Siendo seminaristas, le llamábamos El Amigo, porque precisamente era eso, el amigo que estaba siempre ahí”.

Finalmente, los restos del padre Juan Carlos fueron conducidos hasta el Cementerio Municipal de Chillán, para descansar en la tumba familiar, junto a sus padres.

Fuente: Comunicaciones Chillán
Chillán , 25-01-2023