Las actividades comenzaron temprano, con la bienvenida de los jóvenes anfitriones de Diego de Almagro, a las distintas comunidades juveniles en la plaza, para dirigirse luego al Liceo Miguel Magalhaes. Hubo entusiastas delegaciones de parroquias de los tres valles que componen la diócesis.

“Y ponerse a caminar”

La programación contempló un foro para compartir testimonios en clave vocacional. El primero de ellos correspondió al matrimonio conformado por los asesores de la P. Juvenil. Luego tomaron la palabra una novicia, la hermana Jenny Guevara, María Márquez del Instituto Secular Obreras de la Cruz, el recientemente ordenado P. Rodrigo Herrera, y Fabián, un joven que participa en su comunidad parroquial.

Luego de un alegre y contundente almuerzo, los jóvenes comenzaron una peregrinación que los llevó desde el Liceo hasta el templo parroquial, deteniéndose en seis estaciones, donde los diferentes grupos representaban pasajes de la vida y del testimonio de Don Fernando. En estos momentos los jóvenes destacaron su coherencia, su disponibilidad, su amor por el evangelio, su defensa de los derechos humanos y el ser un hombre fácil de amar.

La caminata estuvo animada por cantos y consignas alusivas al querido Pastor, lo que hizo que los jóvenes obviaran el intensto calor de la tarde y disfrutaran la peregrinación, que terminó en el mismo Liceo, para dar paso a la Eucaristía.

“Dios es nuestro Padre, todos somos hermanos”

La Eucaristía de clausura del encuentro fue presidida por el P. Rodrigo Herrera. En su comentario del evangelio de los talentos, el joven sacerdote instó a los participantes a hacer fructificar los dones recibidos de Dios, tal como lo hizo el recordado Obispo emérito Don Fernando. Así seremos constructores de una sociedad mejor, inclusiva, solidaria y fraterna.

En el ofertorio, los jóvenes presentaron elementos que representaban sus lugares de origen, como el agua y minerales.
En la parte final, se dio lectura a la carta enviada por el Obispo, Monseñor Gaspar Quintana cmf., quien no pudo estar presente por estar iniciando la visita Ad Limina. En su mensaje, don Gaspar los invitó a ayudarle en la tarea de “contarle a la gente de Atacama la Buena Noticia de Jesús: “Dios es nuestro Padre, todos somos hermanos, Jesús nos llama a cambiar el mundo, a cambiar Chile, a cambiar nuestra Región, con la fuerza de su Evangelio”.

También les recordó lo que nos dijo Aparecida, “como discípulos misioneros las nuevas generaciones están llamadas a transmitir a sus hermanos jóvenes sin distinción alguna, la corriente de vida que viene de Cristo, y a compartirla en comunidad construyendo la Iglesia y la sociedad.”

Para finalizar el encuentro, los jóvenes de Vallenar recibieron el signo que los compromete a organizar el VI encuentro el noviembre de 2009.

Después de una jornada agotadora pero llena de gozo y alegría, los jóvenes se despidieron para retornar a sus localidades.

- Mensaje de Mons. Gaspar Quintana

Fuente: Comunicaciones Copiapó


Copiapó, 17-11-2008