Una fuerte declaración pública hicieron llegar las comisiones “Justicia y Paz” y “Agua- Vida” a los medios de comunicación, para dar a conocer su descontento con la aprobación del proyecto Hidroaysen y con la violencia desmedida que vivieron los manifestantes pacíficos que estaban a las afueras del Servicio de Evaluación Ambiental el día de la votación.

Inician sus descargos denunciando la votación sobre el estudio de impacto ambiental presentado por Hidroaysén, ya que consideran “que dicha votación confirma una farsa empresarial y política”. Asimismo confirmaron la presencia de infiltrados entre los manifestantes “con el fin de provocar a las fuerzas de carabineros y desprestigiar ante la opinión pública a todo el movimiento anti represas de la Patagonia chilena”.

A Jesús Herrero, vocero de ambas comisiones de la Iglesia de Aysén, le parece “curioso” que en todas las ciudades donde se manifestaron contrarios al proyecto de Endesa y Colbún, se haya reprimido violentamente a los adherentes que se expresaban pacíficamente.

Otro aspecto que llama poderosamente la atención de las comisiones es que no se haya neutralizado a las personas que efectivamente estaban ejerciendo violencia, a través del lanzamiento de proyectiles. En cambio se haya atacado con caballos, carro lanzaguas, y bombas lacrimógenas, a los que protestaban pacíficamente, así lo precisó Jesús Herrero, quién criticó además la detención selectiva de personas.

Las comisiones “Justicia y Paz” y “Agua-Vida” reiteraron su compromiso con “la Causa de defensa de la Creación”, ya que según expresó Herrero es una exigencia del Evangelio preguntarse qué haría Cristo frente a la inminente destrucción de la Patagonia.

La declaración pública de las comisiones de la Iglesia de Aysén concluye proponiendo tres pasos a seguir. Uno de ellos es “Seguir manifestando el rechazo ciudadano a la prepotencia del gobierno y de los grandes intereses económicos siempre mediante el uso de la no-violencia activa”.

Fuente: Comunicaciones Aysén
Coyhaique, 11-05-2011