Se trata de Flor Quiroz Vidal, quién además se desempeña como encargada de la Pastoral Social de la Iglesia de Aysén.
Un episodio inolvidable para la Iglesia de Aysén se vivió en medio de la celebración de la reunión del Presbiterio Ampliado. Dentro de la Eucaristía matinal, la laica consagrada Flor Quiroz dio un paso importante en su camino vocacional.
Acompañada por sus familiares más cercanos, y de los agentes pastorales presentes en el encuentro, Flor Quiroz renovó indefinidamente sus votos de obediencia, pobreza y castidad, ante el Obispo de Aysén.
Según relató -con emoción- la propia consagrada, tras veinte años dedicada a servir a Cristo a través de su trabajo pastoral en la Iglesia Local, decidió realizar sus votos perpetuos.
La laica consagrada recordó que esta opción de vida es algo que se forja desde su familia, su trabajo en las comunidades cristianas, y el ejemplo de tantas personas que con su testimonio motivaron su vocación a la vida consagrada.
Para el Pastor de la Iglesia de Aysén, Luis Infanti de la Mora, este paso dado por Quiroz es muy relevante, ya que su testimonio es un ejemplo para otros jóvenes que quieran optar por un camino vocacional similar. Asimismo, el prelado destacó el aporte que hacen las laicas consagradas al carisma de la Iglesia local, que es un estilo de consagración novedosa.
Un emotivo momento se vivió en medio de la Eucaristía de profesión de votos perpetuos de Flor Quiroz, cuando siete fieles le obsequiaron -entre abrazos y buenos deseos- de coloridas flores.
Tras la firma del acta de consagración indefinida, el Obispo de Aysén hizo entrega de la Cruz del Tercer Milenio a la laica consagrada Flor Quiroz Vidal.
Fuente: Comunicaciones Aysén
Coyhaique, 17-12-2012