“Habemus Papam”. Con esta célebre fórmula, pronunciada por el cardenal protodiacono Jean Louis Tauran se anunció al mundo entero que la Iglesia Católica ya tenía nuevo Pontífice. Conforme pasaban los segundos, la tensión en la Plaza San Pedro se hacía más intensa entre los fieles, hasta que se develó que el sucesor de Pedro era el cardenal argentino Jorge Mario Bergoglio.

A nivel local, el Obispo de Aysén Luis Infanti se alegró con la novedad, destacando la sencillez mostrada por el Pontífice, en su primera aparición pública en el balcón de la Basílica San Pedro.
En el Vaticano, la multitud de peregrinos se alzó en ovación unánime, recibiendo al nuevo Obispo de Roma, siguiendo atentamente la primera intervención del Sumo Pontífice, momento en que agradeció la recepción de los fieles apostados en la Plaza San Pedro, y pidió a la multitud una oración por "nuestro querido Benedicto XVI, nuestro Papa emérito".

Sobre el nombre escogido por el nuevo Pontífice, Francisco, el Obispo Infanti lo relacionó con San Francisco de Asís, intuyendo que enfatizará una opción preferente por los más desposeídos durante su pontificado.

Para agradecer por el nuevo Papa y orar por su ministerio, este jueves a las 20 horas se celebrará una misa en la Catedral de Coyhaique, a la que invitó Monseñor Infanti a toda la comunidad católica. Asimismo pidió a los fieles de la región que oren por el Papa Francisco en cada comunidad del Vicariato Apostólico de Aysén.

El nuevo Papa es oriundo de Buenos Aires, Argentina. Tiene 76 años y pertenece a la Compañía de Jesús. Quedará en la historia como el primer Papa Latinoamericano y Jesuita, y el número 266 en la sucesión de Pedro.

Fuente: Comunicaciones Aysén
Coyhaique, 14-03-2013