“El límite de la autonomía del Estado está en la ley natural, y si un Estado promulga leyes contrarias a la ley natural estamos en un terreno disociador de la convivencia humana”. Cardenal Jorge Medina Estévez.
El 27 de julio con motivo de los ejercicios espirituales del seminario mayor San Pedro Apóstol estuvo de visita en nuestra diócesis el Emno. Mons. Jorge Arturo Cardenal Medina.
Aprovechando esta oportunidad decidimos realizarle
una entrevista.
- Cardenal Medina ¿Qué significó para usted la participación en los funerales del Papa Juan Pablo II, y luego el tener que anunciar al nuevo pontífice?
* El participar en los funerales del Papa Juan Pablo II fue un acto al mismo tiempo de tristeza, porque partía un gran pastor de la Iglesia; una persona a quien yo le debía mucho, porque fue muy bondadoso conmigo. Me llamó a desempeñar responsabilidades grandes de la Iglesia y yo lo consideraba un ejemplo de pastor. De alegría, porque no me cabe la menor
duda de que fue un testigo de Jesucristo en este mundo y que en la otra vida el Señor lo tendrá en su Santa Gloria.
Anunciar al nuevo pontífice estaba dentro de mis obligaciones, porque yo sabía, que me tocaba por ser Cardenal Protodiácono. Lo hice con alegría, ya que conozco desde hace muchos años al Papa Benedicto. He trabajado con él por años; nos conocimos en 1962, así es que tenía una experiencia muy rica y muy grata de colaboración con él en distintos cargos y distintos quehaceres,
sobre todo en la Comisión Teológica, en la preparación del Catecismo y ahora último, en la preparación del Compendio del Catecismo.
- ¿Qué laborares está desarrollando actualmente en la Curia Romana?
* Labores de asesoría. En diversos organismos de la curia, me pasan carpetas donde se muestra algún problema pidiéndome que estudie los antecedentes; eventualmente pido algunos complementarios y hago un informe de cómo se puede enfrentar un determinado problema o en qué sentido se puede tomar una decisión. Yo informo a veces de palabra, otras veces por escrito al Santo Padre con el parecer de otros cardenales, a veces. El Santo Padre toma la decisión conforme le parezca conveniente. Es un trabajo principalmente de estudio el que realizo.
Mundo actual:
- ¿Cómo ve usted el proceso de secularización en el mundo? (con uniones homosexuales, etc.)
* Es un proceso fuerte que se manifiesta en muchos hechos que muestran que para un número importante de personas y de gobernantes la fe cristiana y la moral cristiana significan bien poco, porque cuando se reconoce legalmente algo que para la ley y moral cristiana es inaceptable, estamos ante un hecho realmente grave. En el fondo, significa desconocer que Dios es la realidad más importante y que todo lo creado tiene una relación con Él; que nada en el ámbito de lo creado puede estar ajeno a la ley de Dios.
- A su juicio, ¿La autonomía del Estado con respecto a la Iglesia
(separación) ha aumentado, de algún modo, el mal que existe en el mundo?
* Hay una autonomía temporal que es perfectamente legítima, como lo manifestó claramente el Concilio Vaticano II, en la Constitución sobre la Iglesia en el mundo actual, pero la autonomía legítima no significa desconocer la ley de Dios. Por lo tanto, si la autoridad civil desconoce la ley de Dios, rebasa o pasa más allá de los límites de una legítima autonomía. El límite de la autonomía del Estado está en la ley natural, y si un Estado promulga leyes contrarias a la ley natural estamos en un terreno disociador de la convivencia humana.
- ¿Qué papel juega la Iglesia en los países en que la fe no es lo más importante y por causa de esto se producen tantas persecuciones?
* La situación es muy variada. Ha habido persecuciones incluso en países donde la fe cristiana estaba muy presente. Por ejemplo, la persecución religiosa en México en la década de los años 20 –siglo pasado-. Ésta se desató en un país profundamente cristiano y católico; de manera que persecuciones ha habido en muchas partes. Hay persecuciones en países donde la Iglesia es una minoría, y donde las autoridades se niegan a reconocer y respetar los derechos de las minorías, sea étnica, sea religiosa. Ahora, Jesús lo anunció: “En este mundo ustedes tendrán muchas persecuciones”. Para la Iglesia esto no es una novedad, y cuando hay persecuciones y gente que muere por la fe, siempre la Iglesia ha pensado que la sangre de los mártires es semilla de nuevos cristianos.
- ¿Qué diría usted en el caso de países como China?
* La situación de la Iglesia en China es variada. Existe una Iglesia
Católica muy sometida al gobierno civil chino, que goza de una cierta libertad, pero que no tiene la posibilidad de comunicarse directamente con la Santa Sede. Últimamente, leí que se había nombrado un Obispo por parte de la Santa Sede con el acuerdo del gobierno Chino, lo que sería muy bueno. Hay
otra cantidad de católicos en China, que viven en la clandestinidad. No sabemos exactamente el número de unos y de otros, pero existe alguna esperanza que con el correr del tiempo se encuentre alguna fórmula para que la Iglesia reciba un trato de mayor consideración, de mayor libertad. El gobierno Chino entiende que la autoridad del Papa entraba la fidelidad y lealtad de los católicos chinos hacia el gobierno. Ese es el motivo por el cual el gobierno de este país tiene una actitud bastante negativa respecto de la Iglesia Católica, pero yo espero que pueda disiparse ese mal entendido y que el gobierno Chino comprenda que la Iglesia Católica no es una traba para el ejercicio de la autoridad civil, sino que se mueve en el campo religioso, naturalmente con las exigencias que la fe tiene en todos los ámbitos de la vida de una persona.
- Ahora, ¿Qué opinión tiene usted de lo actos de terrorismo que se están desarrollando; cree que éstos tienen alguna relación con la Iglesia, con las creencias de las personas?
* El terrorismo es una actitud aberrante, porque emplea la fuerza, violencia, el miedo, como instrumento para conseguir un determinado objetivo y sin reparar en medios. Para el terrorista no es algo reprobable matar una cantidad de personas inocentes, que no tienen nada que ver con sus reclamos.
El Papa ha dicho, repetidas veces, que el terrorismo en toda hipótesis es inaceptable; venga de donde venga. No es una fórmula de resolver problemas. Lamentablemente hay gente que cree que aterrorizando a las personas pueden obtener lo que quieren; lo que creo que es un error muy grande, porque éste
engendra reacciones violentas.
- Me gustaría saber si puede hablar de la primera Encíclica del Papa Benedicto XVI y del tema del relativismo actual, del cual habla el pontífice.
* No tengo ninguna información acerca de una eventual Encíclica del Papa Benedicto XVI. Sé que en el discurso que él hizo, con ocasión de la elección papal, habló del relativismo como uno de los males del mundo. Éste significa que todo da lo mismo; que nada es objetivamente bueno o malo, sino que la calificación de bueno o malo depende de las circunstancias, de las conveniencias, y que lo que fue malo ayer puede ser bueno hoy día y lo que es bueno aquí puede ser malo allá. El relativismo es la negación de la verdad objetiva; es la negación a aceptar que existe la verdad (una) y no un cúmulo de “verdades” que pueden ser contradictorias unas con otras.
- ¿Qué opina de la Constitución de los Estados Europeos, que no reconoce las raíces cristianas?
* En primer lugar un error histórico, colosal, porque si llegara una persona de otro planeta y visitara Europa, prescindiendo de la fe cristiana, no entendería qué son una cantidad enorme de construcciones en Europa (de las más notables); qué significan las catedrales, los museos de arte, los personajes, las escenas que son bíblicas y religiosas. Por lo tanto, negar o prescindir de que Europa tiene raíces cristianas es un error histórico, enorme, garrafal. En segundo lugar creo que es una especie de voluntad negar la influencia de la fe cristiana en la sociedad de hoy. Es como decir, esto no significó nada en el pasado y no va a significar nada en el futuro, lo que es tal vez un error.
Otro Santo para Chile:
- Monseñor, ¿Estará usted en Roma para la canonización del Padre Hurtado?
* Sí, sin duda; si Dios no dispone otra cosa.
- ¿Qué puede decir acerca de este nuevo Santo para Chile?
* Creo que el Padre Hurtado fue un sacerdote muy completo; un hombre de Dios, un hombre de oración, un gran confesor, un gran director espiritual, un gran predicador de retiros; un hombre con una aguda sensibilidad social, con una preocupación intensa por los pobres, por los
problemas de la clase obrera; una persona muy completa en muchos ámbitos. Restringir la imagen del Padre Hurtado a un sólo ámbito me parecería como falsear, ¿verdad?
- ¿Qué diría con respecto a la situación de protesta que se vive hoy, de parte de los grupos evangélicos, por las imágenes del Padre Hurtado que se piensan poner en las calles?
* Alberto Hurtado representa una riqueza para Chile. Nadie va a ir a adorar una imagen del Padre Hurtado. Una imagen de él, es un recuerdo de una persona que tuvo relevancia en nuestro país, y recordar a las personas que tuvieron relevancia no tiene en sí nada malo; como hay estatuas de O´Higgins, de San Martín, de Manuel Rodríguez, del General Freire, del General Bulnes, etc. Ahora, para un cristiano es una representación de una
persona que dejó un legado espiritual importante, una persona que está en la gloria de Dios. Pero quienes tienen estas preocupaciones -los protestantes- podrían recordar que hay en Ginebra (zona netamente protestante) una cantidad de estatuas de los fundadores de la reforma. No sé si ellos querrían echarlas abajo también.
Por María José Huaquín Gertosio.
Fuente: Comunicaciones San Bernardo
San Bernardo, 06-09-2005