Con cuatro nuevos Diáconos permanentes cuenta la Diócesis de Valdivia. Tres de ellos José Gárate, Miguel Alarcón y Alejandro Rivas, pertenecen a la Parroquia Todos Los Santos de Los Lagos; el cuarto, Víctor Garnica Vergara, pertenece a la Parroquia Cristo Rey. Todos recibieron la ordenación diaconal de manos de Mons. Ignacio Ducasse, acompañados de sus párrocos, sacerdotes, hermanos en el ministerio diaconal, sus respectivas familias y fieles de la Diócesis.
Impresiones de los Nuevos Diáconos
Alejandro Rivas, visiblemente emocionado, dijo:
"El Señor me ha concedido realizar el trabajo que me tiene reservado. Le serviré donde sea necesaria mi presencia".
Por su parte, José Gárate hizo un especial llamado a la comunidad a trabajar en conjunto.
"Después de varios años de preparación, hoy estamos cumpliendo con nuestro mayor anhelo de ser Diáconos permanentes lo que nos lleva a un compromiso mayor como es trabajar por la construcción del Reino de Dios. Pido a la comunidad que nos siga acompañando y acogiendo para desarrollar junto a ellos este servicio".
Un apoyo fundamental dentro del proceso hacia el diaconado y en el ejercicio del mismo es la familia, como lo destacó Miguel Alarcón.
"La familia juega un papel muy importante, ya que nuestras esposas e hijos deben acompañarnos en esta labor y muchas veces debemos sacrificar parte del tiempo que les dedicábamos a ellos para atender los diferentes trabajos de la parroquia. A ellos mi gratitud por acompañarme en esta misión".
Asimismo, Víctor Garnica subrayó que el Diaconado no es un título personal, sino un don al servicio de los demás.
"Recibo con mucha alegría este regalo que el Señor me hace. Espero, con su gracia, realizar bien este servicio a la Iglesia. Les pido humildemente seguir orando por mí. Recuerden hermanos, que el diaconado no es título personal, sino un servicio y desde allí quiero y deseo amar al Señor".
Mons. Ignacio Ducasse, precisó que
"el Diácono tiene un papel fundamental en el cuidado y crecimiento de la viña del Señor, el que realiza a través de un triple servicio. Llevar la Palabra de Dios a todas partes, en nombre de la Iglesia... a través de la predicación, la enseñanza a través de la catequesis y las diversas formas con que la Iglesia entrega la Palabra de Dios. La segunda, el Servicio a la Caridad llevando a la práctica el contenido del Evangelio; ejercitar la caridad en todas sus formas, en la solidaridad, en la justicia y la verdad para plasmar el Evangelio del Señor en la vida. Y, finalmente, el Servicio al Altar, concentrado fundamentalmente en el sacramento de la Eucaristía donde, en colaboración con los presbíteros y el obispo, se pone al servicio de esa poda, para poder también él llevar los frutos de la viña a sus hermanos, especialmente a través de la Comunión, distribuida al interior de la celebración y también llevada a los enfermos", puntualizó.
Para la Diócesis de Valdivia, será vital la labor ministerial de estos cuatro hermanos, que se suma a la del escaso clero y a los múltiples requerimientos pastorales.
Fuente: Comunicaciones Valdivia
Valdivia, 04-10-2005