Participaron de la Eucaristía el padre obispo Monseñor Bernardo Bastres, el clero diocesano, sacedortes salesianos, vicentinos, diaconos, religiosas, autoridades civiles, fieles de diversas comunidades de la diócesis y la familia de Monseñor Goic.

Goic en su homilía agradeció la invitación del obispo Bernardo Bastres para poder celebrar sus 50 años de ordenación sacerdotal en su ciudad natal. También demostró su inmenso amor por Magallanes diciendo: “Bendigo al Señor por haberme hecho nacer en esta tierra bendita, yo partí porque así Dios lo quiso, pero mi corazón esta siempre en Magallanes”. Señaló que para el ministerio sacerdotal es fundamental el rostro de los laicos recordando a tres personas que marcaron su ministerio sacerdotal en Punta Arenas, cuando fue vicario parroquial en San Miguel y párroco de Fátima. Al mismo tiempo pidió oraciones por las vocaciones para la diócesis de Magallanes.

En la homilía también señaló “la importancia de encarnar el sentimiento que guardaban los tres amores de Jesús: el amor a su Padre, a los pecadores y a los pobres”, sellando así el obispo un potente llamado a la reflexión y a mantener la fe. “La Iglesia es una familia para dar a conocer el rostro de Dios” dijo.

Al final de la misa el padre Marcos Buvinic Martinic dio lectura a una carta enviada por el papa Francisco desde el Vaticano, dirigida a Monseñor Goic

Fuente: Iglesia de Magallanes

Punta Arenas, 07-03-2016