Entre sus expositores estuvo la religiosa puertorriqueña Elena Lugo, socióloga y psicóloga, de las Hermanas de María del Instituto Secular de Schoënstatt.

Bajo el lema “Espiritualidad Kenteniana como instrumento de salud al servicio de la cultura”, el sábado 20 de mayo tuvieron lugar en Chillán Viejo las
Segundas Jornadas Nacionales de Schoënstattianos de la Salud.
El encuentro contó con la participación de una treintena de agentes vinculados al tema de la salud de distintas partes del país y se realizó en la sala múltiple del Santuario “Monte Horeb” de Schoënstatt, ubicado en el sector suroriente de Chillán Viejo, por el camino conducente a Yungay.
Su principal expositora fue la religiosa Elena Lugo, de las Hermanas de María del Instituto Secular de Schoënstatt, socióloga y psicóloga puertorriqueña, doctorada en la Universidad Georgetown, de Washintong D.C., en Estados Unidos. Su participación contempló dos temas: “El sufrimiento y el dolor en el paciente terminal a la luz de la espiritualidad kenteniana” y “Cuestiones de bioética al inicio de la vida”.
Sobre el primero de estos temas, la estudiosa señaló que la Iglesia está llamada a desarrollar una pastoral de la salud preocupada por la humanización del natural proceso de la muerte. La idea es que los pacientes terminales puedan gozar de un buen morir, primero, a partir de un acompañamiento que evite cualquier posibilidad de eutanasia o muerte asistida, cada vez más presente y aceptada como opción en la sociedad moderna.

Para ello, profundizó, es importante trabajar en la evangelización del momento de la muerte, a través de un camino que conduzca a un profundo encuentro espiritual del paciente con el Señor y con sus seres queridos.
Con respecto a las cuestiones de bioética al inicio de la vida, la doctora puertorriqueña Elena Lugo indicó que hay en la actualidad hay dos temas de mucha controversia y contingencia: la clonación y, particularmente en nuestro país, la discusión vigente sobre la píldora del día después. Sobre el primero, señaló que la Iglesia denuncia fehacientemente el proceso, pues la manipulación de embriones es jugar con la dignidad de un ser vivo.
En cuanto a la píldora del día después, la profesional indicó que las investigaciones científicas emprendidas desde la Iglesia confirman que su administración es abortiva y por lo tanto su consecuencia es la muerte de un futuro ser humano.
Otro importante tema tratado fue el “Reglamento sobre asistencia religiosa en recintos hospitalarios”, que estuvo a cargo del doctor Germán Acuña Gamé, médico anestesista y de tratamiento del dolor, docente de la Universidad de Concepción y miembro del equipo médico del Hospital Regional penquista; quien señaló que la normativa en vía de aprobación tiene su principal característica en su artículo n° 2, que reconoce el derecho de los pacientes a recibir asistencia religiosa en cualquier centro de atención médica.
La creación de este reglamento fue heredado del gobierno de Ricardo Lagos; y su promulgación como ley debería concretarse en el curso de los próximos meses. No obstante, señaló el doctor Germán Acuña, hay algunas cosas que están al margen de la normativa y que deberían ser estudiadas, como: la obligación de hacer un curso de infección intrahospitalaria para los agentes pastorales de la salud que entran en contacto con pacientes internados; y un curso básico de reglamento hospitalario y comportamiento en su interior.
Un tercer tema que debería ser evaluado es el catastro de asistentes espirituales, para que sea actualizado y serio. En ello es fundamental solicitar una acreditación mínima como una credencial certificada por su obispo o pastor, y de una religión conocida.
Las II Jornadas de Schoënstattianos de la salud, además contó con el tema “Aplicación del amar, pensar y vivir orgánico en salud”, a cargo de la enfermera Laura Paredes, de la Unidad de Tratamiento de Heridas del Hospital del Trabajador de Santiago.
Finalmente, se concluyó con una misa de envío, presidida por el padre Fernando Varas González, asesor diocesano de la Pastoral de la Salud.
Fuente: Comunicaciones Chillán
Chillán, 22-05-2006