El jueves 7 de septiembre, con una Eucaristía presidida por el Cardenal Arzobispo de Santiago, Monseñor Francisco Javier Errázuriz, se dio gracias a Monseñor Eladio Vicuña, Arzobispo emérito de Puerto Montt y se le dio la bienvenida a Monseñor Cristián Contreras Villarroel, Obispo Auxiliar de Santiago, como presidente de la Sociedad de Escuelas Santo Tomás, creada hace 136 años al alero del Arzobispado de Santiago.

Con mucha alegría, con un coro de niños, la presencia de bandas escolares y la traducción al lenguaje de señas para estudiantes sordomudas, cientos de niños y jóvenes se dieron cita en la Catedral para agradecer por la educación recibida de las escuelas Santo Tomás. La sociedad educacional está integrada por establecimientos con buena infraestructura que entregan educación de calidad y formación espiritual a adolescentes de escasos recursos. Durante la mañana del 7 de septiembre fue la oportunidad para agradecer la preocupación y cercanía de Monseñor Eladio Vicuña a la cabeza de la Sociedad y de desearle parabienes a Monseñor Cristián Contreras, quien asumió ese día el cargo.

Durante la homilía el Cardenal Francisco Javier Errázuriz señaló que la barca donde Jesús predicaba es similar a la barca, representada por los colegios, donde los Obispos muestran la Palabra de Jesús a los jóvenes. Agregó que, si la respuesta es positiva al seguimiento del Maestro, Jesús es generoso en retribuir esta entrega con una pesca abundante y convirtiendo a los pescadores en pescadores de hombres. “Así es de generoso el señor. Así nos regala el Señor en sobreabundancia siempre. Siempre que echemos las redes confiando en Él”, explicó. En alusión al cambio en la presidencia de las Escuelas Santo Tomás pidió que, al igual que don Eladio Vicuña, Monseñor Contreras pueda ejercer su cargo “con la misma fecundidad, espíritu de fe y con la misma confianza en el Señor”

Monseñor Vicuña agradeció especialmente a tres personas que, a su juicio, son fundamentales para la Sociedad de Escuelas Santo Tomás: Luis Alberto Fernández Larraín, vicepresidente por 30 años; su hijo Luis Alberto Fernández León, por haber reconstruido toda la infraestructura de los establecimientos y al Pbro. Cristián Catalán por su entrega al servicio y a la educación de los niños y jóvenes. Por su parte, Monseñor Contreras dijo al final de la Misa las siguientes palabras: “Asumo esta responsabilidad con aquel espíritu que proviene de la fe, es decir, con apertura de corazón para poder recibir a todos y a cada uno de ustedes. Recibo un encargo que, a la vez, es una herencia”. También agradeció a los colaboradores y añadió, “quiero conocerlos a todos en sus ambientes de trabajo, quiero que cuenten con un sacerdote, un obispo y un amigo para todos ustedes”.

Fuente: DOP www.iglesiadesantiago.cl
Santiago, 07-09-2006