Con mucha alegría la comunidad de la parroquia Nuestra Señora del Carmen de Chile Chico, a orillas del lago General Carrera (Chelenko), vivió la celebración de la confirmación en su fe de siete de sus jóvenes, acompañados por el padre Obispo Luis Infanti y el diácono Carlos Vergara.
Daniela, Luis, Víctor, Camilo, Francisco, Scarlet y Francisca —los siete de Chile Chico— confirmaron su fe después de casi tres años encuentros presenciales y virtuales, pandemia mediante, con altos y bajos pero firmes en el camino. Junto a sus dos catequistas no perdieron el entusiasmo y perseveraron en su encuentro con el Resucitado.
Paulina Hernández, una de las catequistas de los jóvenes, valoró el proceso vivido. “Hay sentimientos encontrados —compartió. Fue muy difícil; nos tocó un momento complejo. La pandemia nos jugó la mala pasada de tener que eliminar algunos encuentros, suspenderlos, retomar… Pero me quedo con lo maravilloso de haber conocido a grandes jóvenes, mujeres y hombres, que sin duda nos enseñaron a recorrer este camino con la sencillez de un niño, con la honestidad y sobre todo con un corazón puro”.
Juventud y misión
El día anterior —sábado— los siete confirmandos sostuvieron un encuentro con el padre Obispo Luis quien los animó en el sacramento de la reconciliación que iban a recibir, comunitaria e individualmente, momentos antes de la misa del domingo.
Respecto a estos jóvenes y la misión que la comunidad asume con ellos, el Pastor de Aysén destacó que “es un gran don para toda la Iglesia de Aysén. Sentimos que la presencia de Dios renueva nuestra fe para ser discípulos de Jesús, misioneros muy incisivos en la política, la economía, la cultura, el deporte; cada lugar donde el Señor nos coloque. Somos sus discípulos y queremos dar sabor, sentido, santidad; a la vida de nuestro pueblo”.
La joven voz del Espíritu
La eucaristía fue animada por una familia. Marina Loncón, la mamá de este grupo familiar, integrante de la comunidad de Chile Chico, caracterizó la celebración como “muy hermosa, sencilla; muy de piel y corazón. Estamos felices porque se siente la presencia del Espíritu Santo en las familias. Confirmación, primera comunión o cualquiera de nuestras celebraciones tiene que ver con la presencia de Jesucristo. Él está acá y el Espíritu Santo lo vimos y sentimos rondar por aquí”.
Animada por ese mismo Espíritu Daniela Sepúlveda(16) vivió una doble gozo: hizo en la misma celebración su primera comunión y confirmación. “Me siento —dijo— llena de alegría. Pude confirmar mi fe en Dios y siento que estoy ahora mucho más cerca de Él. Estoy pensando en compartir nuestra fe e iniciar un nuevo grupo confirmación que comparta con la sociedad y, así, más niños y niñas se animen a hacer lo que hicimos nosotros hoy”.
Otro de los jóvenes confirmandos, el gemelo Víctor Pozas(16), terminada la misa expresó tener en este día “muchos sentimientos pero el amor a la Iglesia, a Cristo, es el que sobresale. Y, también, agradecer a mis catequistas que me ayudaron en este camino; al diácono Carlos y al padre Obispo que tuvo el tiempo de venir. Les agradezco a todos y voy a seguir así, con esta fe y logrando siempre cosas buenas junto a Dios”.
Terminada la celebración eucarística, y tras las tradicionales fotografías de rigor, los jóvenes confirmados se reunieron con sus familias, y hermanos y hermanas de la comunidad de Chile Chico, para sostener un compartir fraterno que continuó celebrando la alegría y presencia del Resucitado y su Espíritu Santo en medio de sus vidas.
Fuente: Comunicaciones Aysén
Chile Chico, 07-09-2021