Como primicia de lo que significa en profundidad “caminar juntos” el obispo de Aysén, sacerdotes, diáconos, religiosas y laicos del consejo pastoral (COP) se reencontraron presencialmente para vivir un fuerte momento de oración y fraternidad que animará el proceso de renovación eclesial en toda la región este 2022.
El diácono Carlos Vergara, de Chile Chico, inició la jornada convocando a los presentes a un intenso momento de adoración al Santísimo en la capilla de “Casa Belén” en Coyhaique. Luego vino el trabajo fuerte de la mañana para entrar “en tierra sagrada”, con set preguntas formuladas especialmente para sacerdotes, diáconos, religiosas y laicos; que contó con el apoyo técnico de la comisión nacional de animación sinodal.
La mañana cerró con una liturgia al aire libre organizada por todas las mujeres presentes en el encuentro para recoger y dar gracias por el compartir y la intimidad de lo vivido en los grupos. En la tarde, expuso brevemente la agente pastoral Raquel Pérez su experiencia como participante de la 1° Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe; y los doce desafíos con que esta concluyó.
El día terminó con un ejercicio previo para formular el lema que animará las jornadas zonales vicariales que se desarrollarán en toda la región entre marzo y abril de 2022; y una compartida y fraterna “cena del Señor” que presidió el padre José Barría, párroco de Puerto Cisnes.
Testigos de reencuentro y fraternidad
Para el diácono permanente Juvenal San Martin, encargado parroquial de Cochrane, la jornada fue “muy provechosa; el reencuentro entre nosotros para ‘recargar pilas’ es vital. Recibir nuevamente el espíritu en estas instancias te fortalece”, destacó.
La encargada de la pastoral del migrante, Lorena Guerrero, enfatizó que este encuentro fue “muy profundo en términos de reflexión en torno al camino que debe hacer la Iglesia de Aysén en este sínodo que ha convocado el Papa Francisco; que es hacer camino, reconstrucción de Iglesia y encontrarnos con nuestros hermanos en comunidad”.
El padre José Barría también agradeció esta instancia de encuentro vicarial. “Me pareció esperanzadora —dijo— con muchos sueños para la Iglesia de Aysén, y nosotros somos parte de hacerlos realidad”.
“Fue —agregó— una jornada muy buena donde pudimos compartir, encontrarnos y saludarnos. Solo eso alegra el corazón y el alma. Y eso nos hace bien para sentir que somos parte de esta Iglesia que peregrina en la Patagonia”.
La hermana Jessica Durán, de La Junta, aseguró irse contenta. “Ha sido —expresó— muy enriquecedor compartir con hermanos de todo el vicariato, y me quedo sobre todo con la fraternidad, con el hecho de haber compartido. Esperanzada, también, por el trabajo que se viene”.
Quien también compartió sus impresiones sobre esta convocatoria fue el padre obispo Luis Infanti. “Como Iglesia de Aysén —explicó— hemos querido concluir este año con un encuentro muy fraterno dando inicio, también, a una nueva etapa de la Iglesia de Aysén en consonancia con el llamado del Papa Francisco para caminar juntos frente a los desafíos, las búsquedas, los dolores y a las alegrías de nuestros pueblos”.
“Queremos sentir —puntualizó el pastor de Aysén— que desde Dios nuestra vida tiene sentido caminando y avanzando, juntos, para fortalecer nuestro servicio a jóvenes, niños, adultos mayores, mujeres, matrimonios. Frente a tantos desafíos de hoy queremos alcanzarlos con mayor ternura, misericordia y fuerza”.
Fuente: Comunicaciones Aysén
Coyhaique, 30-12-2021