En una sencilla ceremonia, el obispo de Copiapó, Monseñor Ricardo Morales, bendijo la hermosa imagen de Nuestra Señora del Carmen, que desde el pasado 5 de julio engalana una de las paredes del patio del obispado de Copiapó, que es una representación del mosaico que se ubica en los Jardines Vaticanos.

Dirigiéndose a quienes asistieron a la ceremonia, el obispo destacó que el patio de la curia “es un espacio de espera; allí donde están sentados ustedes, se sientan cada día personas que llegan hasta aquí a buscar ayuda, especialmente hermanos migrantes, cada uno con sus historias, sus esperanzas, sus dolores; muchos de ellos han caminado meses para llegar al país”. Dijo: “Qué mejor que María para acompañar esta espera, esta acogida a sus hijos”.

Esta obra es un aporte de la Fundación Manos Abiertas, y representa un mosaico de la artista chilena Francisca Claro, y que el Gobierno de Chile regaló al Vaticano. Está confeccionada con materiales recogidos de todo el país, incluyendo la Isla de Pascua, en un trabajo que se extendió por dos años, realizado en un clima de oración.

Para finalizar, el obispo bendijo y repartió rosarios a los asistentes, animándolos en la oración de esta sencilla y profunda devoción mariana.

La ceremonia contó con el apoyo de Pucobre, cuyos yacimientos dieron algunas de las piedras que se enviaron a Roma para el mosaico. También se presentó el coro, integrado por trabajadores de la empresa. Entre quienes asistieron se cuentan representantes de la Fundación Manos Abiertas, y funcionarios de la curia diocesana.

Fuente: Comunicaciones Copiapó
Copiapó, 10-07-2023