Con gran devoción Diócesis de Osorno peregrinó en Solemnidad de la Inmaculada Concepción

Con gran devoción Diócesis de Osorno peregrinó en Solemnidad de la Inmaculada Concepción

Masivo peregrinar vivieron miles de fieles por las calles de la ciudad osornina y sus alrededores, para celebrar a la Madre del Señor en festividad de la Inmaculada Concepción y la clausura del Mes de María.

Sábado 09 de Diciembre de 2023
De Norte a Sur, de Cordillera a Mar se escucharon los cantos, las oraciones de los peregrinos que caminaron junto a la imagen de la Santísima Virgen y dieron testimonio de la fe de la porción del Pueblo de Dios en la Diócesis de Osorno.

En la capital provincial, doce comunidades llegaron una a una hasta el Campo de Oración en Pilauco, donde rezaron el Santo Rosario que guió la hermana Carla Montero, religiosa de la Santa Cruz, y junto al Obispo Carlos Godoy Labraña celebraron la Santa Misa en honor a la Llena de Gracia, bajo la advocación de la Inmaculada Concepción.

En la ocasión el Pastor de la Iglesia osornina inició su homilía con el origen de esta solemnidad de María Inmaculada, y la predilección de Dios por la Madre de su Hijo. Continuó su mensaje en torno a la primera lectura (Gén. 3, 9-15.20) donde se relatan “los momentos posteriores al pecado de nuestros primeros padres”, y donde se ve cómo se ha roto la armonía de la creación, y se “desarrolla un diálogo entre Dios y el ser humano”.

Señaló que la pregunta al varón “¿Dónde estás?”, es más bien una pregunta existencial, más allá de saber el lugar físico porque nos siempre “estamos conscientes en donde estamos”, y agregó que “No siempre somos conscientes de lo que hacemos y nos termina dominando el activismo o el hacer por hacer. ¿Dónde estás?, ¿dónde está tu corazón?, ¿dónde están tus opciones? Hoy más que nunca se requiere de respuestas vitales y coherentes, de manera que lo que pensamos, sentimos y hablamos seamos capaces de traducirlo con nuestras obras. Como María Santísima”.

Aseguró el obispo Carlos que esta pregunta, también llega a los oídos de la Iglesia. “¿Dónde te encuentras Iglesia? ¿Acaso, te encuentras atrincherada y refugiada en tus propias seguridades? ¿Acaso, te encuentras aprisionada en la preservación de una imagen ilusa de poder y prestigio? ¿Acaso, te encuentras en la desidia frente a los casos de todo tipo de abuso? ¿Acaso, te encuentras rumiando tu desolación y lamiendo tu propia herida?”, y agregó “Es bueno que tú, Iglesia de Osorno te preguntes donde te encuentras, te sinceres con tu Señor, vuelvas a Él y te cuestiones donde has caído, despiertes dejándote tomar de la mano de Jesús y empieces a caminar con fuerzas testificando la vida nueva que Dios te da”.

Añadió que Dios también interrogó a la mujer, y tal como Adán culpó a Eva, ella culpó a la serpiente, por tanto, el relato “desenmascara la hipocresía humana y la permanente tentación de echarle la culpa a los otros. Los otros debiesen pedir perdón. Los otros debiesen reconocer su error. Los otros son los responsables de tal o cual situación. Es el proceso de culpabilización que con frecuencia lleva a la violencia entre los miembros de una comunidad, ya sea familiar o eclesial”.

Destacó que la mujer se da cuenta “de que al origen del mal está el príncipe de la mentira”, quién “lo único que hace es desunir, mentir y quebrar relaciones. No le sigamos el juego y pensemos que nuestra vocación más profunda es el amor”, y añadió que Dios, pese al engaño, continúa buscando al hombre, “y anhela restablecer el quiebre de nuestra amistad”.

Sin embargo, enfatizó que, al enfrentar a la serpiente, a Dios le cambió el tono de voz, “ya no hay diálogo, sino que Dios toma un tono autoritario de condena y rechazo. Es que con el diablo no se negocia”, porque la tentación es dejar a Dios al margen de la propia vida, “y el hombre se vuelve contra el hombre”.

También invitó al pueblo peregrino presente a mirar a María, y a la luz del Evangelio del día (Lc 1.26-38), dijo que, en este texto, “vemos cómo entra la voluntad de Dios en el corazón de una mujer pura y sencilla. Con el saludo del ángel, el texto revela la realidad de María: ella es la llena de gracia”, y añadió que “No hemos sido creados para el mal, sino para el bien. No nos es natural el pecado. En cambio, la gracia es tan original. Por esa razón, es que cada vez que volvemos a Dios, su Espíritu sale a nuestro encuentro para saludarnos con un alégrate. Alégrate, tú que has sido creado para amar, alégrate porque has sido creado para ser feliz, alégrate porque Dios te elije, te ama y te abraza a cada instante”.

Finalmente, explicó que “María a diferencia de Eva, entiende el anuncio y la vocación a la que ha sido llamada a pesar de no saber mucho cómo sucederán todas estas cosas. Por un lado, intuye por donde se va moviendo el espíritu y por otro, se muestra dócil a lo que Dios le pide. Por no tener pecado, no se esconde. No se avergüenza de estar desprovista o desnuda de mayor comprensión. No te escondas de Dios, vive siempre en su presencia, en su amor. Amén”.

Fuente: Comunicaciones Osorno
Osorno, 09-12-2023
Documentos Adjuntos:
   Galerías:
Ver Galería
Ver Galería
Ver Galería
Ver Galería