“Solo aquel que ama realmente asume la cruz”: Obispo Covili llama a vivir una fe encarnada durante Vía Crucis en Alto Hospicio

El obispo de Iquique instó a transformar el sufrimiento en amor concreto y servicio desde la comunidad

“Solo aquel que ama realmente asume la cruz”: Obispo Covili llama a vivir una fe encarnada durante Vía Crucis en Alto Hospicio

El hermano Isauro Covili, obispo de Iquique, acompañó a los fieles en una jornada marcada por la fe, el dolor y la esperanza.

Sábado 19 de Abril de 2025
En la tarde del Viernes Santo, la comunidad parroquial Nuestra Señora del Carmen de Alto Hospicio conmemoró la pasión del Señor con un emotivo y participativo vía crucis, desarrollado en cinco sectores del territorio parroquial. Cada grupo de fieles vivió este camino de oración en paralelo, acompañados por las hermanas Corde Jesu, el diácono Ibar Escobar, un sacerdote de Missio Ad gente y los padres misioneros provenientes de Corea del Sur.

El hermano Isauro Covili Linfati, obispo de la Diócesis de Iquique, se sumó al vía crucis en el sector de las tomas cercanas al Hospital, acompañando a una familia y a los fieles que se fueron integrando durante el trayecto. En un ambiente de recogimiento y reflexión, los creyentes recordaron el camino de Jesús hacia la cruz, reconociendo en cada estación el sufrimiento del mundo actual.

Finalizado el recorrido, la comunidad se reunió en el templo parroquial para celebrar la Liturgia de la Pasión del Señor. La ceremonia fue presidida por el obispo diocesano, junto a los misioneros internacionales de Seúl y las hermanas Corde Jesu.

Durante su homilía, el obispo Covili reflexionó profundamente sobre el sentido de la cruz y del amor radical de Cristo por la humanidad: “Jesús no buscó la muerte. La muerte apareció como consecuencia de su compromiso y amor apasionado por el Reino, por los pobres, por los excluidos y descartados de la sociedad”, expresó.

Asimismo, afirmó que la cruz no es un invento, sino un hecho real e histórico que interpela a los cristianos a abrazar la realidad del sufrimiento humano: “El viacrucis siempre nos remite a los propios sufrimientos de cada uno, pero también a los de la humanidad. En cada hombre y mujer, Dios sigue padeciendo, sufriendo, muriendo y resucitando”.

El obispo también abordó la dimensión subversiva del Evangelio, que cambia el orden social y nos invita a vivir desde la humildad y el servicio: “Jesús invierte el orden: el que quiera ser el mayor, que se haga servidor de todos. El más importante no es el que está arriba, sino el que se hace pequeño, el que toca la realidad, el que contempla a Jesús crucificado en los crucificados de la historia”.

Finalmente, hizo un llamado a que las celebraciones no sean solo ritos vacíos, sino que transformen la vida concreta de los creyentes: “Solo aquel que ama realmente asume la cruz. Sin amor, no hay cruz que se pueda cargar. Desde el grupo, desde la comunidad, podemos construir una sociedad más fraterna, más cercana, donde valoremos a cada persona”.

La jornada concluyó en un clima de esperanza, con la invitación a seguir caminando en fe junto al Crucificado, renovando el compromiso de vivir el Evangelio en lo cotidiano.

Frente: Comunicaciones Diócesis de Iquique
Alto Hospicio, 19-04-2025