La elección del Papa León XIV ha sido recibida con profunda alegría por la Orden de San Agustín, particularmente en Chile, donde su figura dejó una huella cercana y fraterna durante sus años como prior general. En la Arquidiócesis de Concepción, los padres Samuel Jara OSA, párroco de San Agustín de Concepción, y Yuliano Viveros OSA, párroco de El Buen Pastor de San Pedro de la Paz, compartieron su testimonio y reflexiones sobre este hito eclesial.

“El día de hoy estamos reunidos todos los Agustinos acá en Santiago porque celebramos el Día de Nuestra Provincia, Nuestra Señora de Gracia, una vocación mariana agustiniana. Y en medio de esta fiesta, se dio esta sorpresa tan bonita que se transforma en una bendición para nosotros, y también en un desafío como Agustinos, donde ponemos nuestra espiritualidad al servicio de la Iglesia, que es nuestro carisma”, expresó el padre Samuel Jara.

El religioso recalcó la cercanía del nuevo Pontífice con Chile: “El Papa León XIV es un hermano nuestro. Lo hemos conocido, hemos compartido con él. Ha estado en varias ocasiones acá en Chile, en comisiones, reuniones, y especialmente nuestros colegios lo recuerdan con cariño. Jóvenes que compartieron con él en Jornadas Mundiales también han enviado saludos y fotos. Es alguien que siempre ha generado vínculos, ha procurado crear comunidad”.

En esa misma línea, el padre Yuliano Viveros destacó: “Fue General de la Orden durante 12 años, y lo que más potenció fue nuestra identidad agustiniana: la comunión. Para un Agustino el primer apostolado es la comunidad. Ha sido una gran sorpresa y al mismo tiempo una gran alegría, más aún porque fue elegido el día de Nuestra Señora de Gracia, patrona de nuestra provincia”.

El sacerdote rememoró el momento en que, sin saber quién era el nuevo Papa, debió mencionarlo en la plegaria eucarística: “Me tocó a mí esa parte de la misa. Pedí por el Papa, sin saber que era nuestro hermano. Luego de la celebración, todos reunidos en comunidad, celebramos con alegría esta elección”.

Su visita a Chile y vínculo con la Iglesia local
Ambos religiosos destacaron la cercanía del nuevo Papa con la comunidad chilena y con la comunidad agustiniana local. “Cuando estuvo en Chile, yo recuerdo haberlo conocido al ingresar a la Orden el año 2000. Tuvimos la posibilidad de dialogar y compartió con mucha humanidad cómo era el servicio del prior general. Era un hombre dialogante, cercano, claro. Un pastor y misionero”, señaló el padre Yuliano.

Según explicó, León XIV visitó Chile al menos en dos ocasiones para presidir capítulos provinciales de la Orden y revisar la vida del apostolado. En ese marco, también llegó a Concepción, como recuerdan en el Colegio San Agustín, que compartió imágenes del entonces prior general durante una visita en 2002 a la ciudad.

Espíritu de comunión
Ambos sacerdotes coinciden en que su elección representa una continuidad con el legado del Papa Francisco. “Va a permear su pontificado con la espiritualidad agustiniana. Vivir en comunidad es uno de nuestros pilares. Él lo vivió y lo transmitió. Seguramente desde ahí animará la vida eclesial y sus estructuras”, expresó el padre Samuel, quien valoró también su cercanía con la advocación mariana de Nuestra Señora del Buen Consejo, patrona de los Papas.

El padre Yuliano añadió: “Creo que va a ser recordado como el Papa de la paz. Así lo anunció con sus primeras palabras: ‘La paz esté con ustedes’. Escogió el nombre León XIV en sintonía con León XIII, quien tuvo un profundo aprecio por nuestra Orden y fue autor de la primera encíclica social, Rerum Novarum. Pienso que ese será un eje de su magisterio”.

Finalmente, ambos manifestaron su gratitud a Dios por este momento de gracia para la Iglesia. “Nos sentimos agradecidos y también desafiados. Este es un tiempo de oración, esperanza y comunión. Como Agustinos, rezamos por el Papa León XIV, para que el Señor lo acompañe en el ejercicio de su ministerio petrino”, concluyeron.

Fuente: Comunicaciones Concepción
Concepción, 09-05-2025