1. “La Iglesia se pone a la escucha... del grito de todas las víctimas”. Así escribía Juan Pablo II en su mensaje con ocasión del final en Europa de la segunda guerra mundial, hace poco menos de un año, el 8 de mayo de 1995. Por eso, como Pastores escuchamos desde aquí el dolor de esas víctimas en el Líbano y pedimos oraciones a todos para que llegue lo más pronto la paz a esos lugares.
2. Sabemos que en estos conflictos no hay una sola parte, sino que es la proyección de previos enfrentamientos armados que también han dejado víctimas en Israel. Pero “¡no se puede y no se debe ceder ante la lógica de las armas!”, también decía Juan Pablo II en el citado mensaje. Por esto, repetimos también con él: “¡Nunca más la guerra! ¡Sí a la paz!”.
3. Duele pensar en tantas víctimas que van dejando estos conflictos y preocupa considerar el destino de las generaciones jóvenes de esos pueblos como testigos de esta violencia organizada y sostenida. ¿ Serán esos jóvenes constructores de un mundo en paz?.
4. Para esos pueblos hermanos pedimos a todos los católicos y a todos los de buena voluntad especiales e intensas oraciones en estos días para que la paz llegue a todos, particularmente a esos pueblos en conflicto y no haya más víctimas de la violencia. y como un aporte a esta causa cada uno de nosotros empeñémonos para vivir en paz con la gente que nos rodea y así podremos colaborar para que llegue la paz definitiva a esos hermanos del Líbano.
5. Encomendamos al Señor que, especialmente en este tiempo pascual, nos trae la paz y a la Santísima Virgen María, Reina de la Paz, nuestras oraciones para que todos podamos vivir en paz.
Santiago, 25 de abril de 1996
† CARLOS OVIEDO CAVADA
Cardenal Arzobispo de Santiago
Presidente de la Conferencia Episcopal de Chile
† JAVIER PRADO ARÁNGUIZ
Obispo de Rancagua
Secretario General de la Conferencia Episcopal de Chile