Eran muestras de fe con identidad de discípulos misioneros: “Vengo a dar gracias a Dios por la salud de mi hijo”, dijo María. “Vengo a pedir a san Sebastián interceda ante Dios por la salud de mi esposo”, señaló Elena. “Yo vengo cada año desde Futrono a agradecer por las buenas cosas que me ha tocado vivir”, expresó Victoria. “Dios, a través de san Sebastián, salvó a mi hija de morir, vengo a agradecer la vida”, dijo un emocionado Raúl. “Yo vengo a celebrar y a pedirle a chavita, como le digo con cariño, que me irradie su fe, dijo su ‘tocayo’ Sebastián“. Como ellos, numerosos fieles celebraron y agradecieron a Dios en la fiesta del famoso mártir.

En Calle-Calle, situado a 25 kilómetros de Valdivia, la belleza y entorno natural, fueron el templo que acogió a los numerosos peregrinos. La principal celebración, como es tradicional, se realizó al medio día, con la Eucaristía y procesión presidida por el P. Ulises Aliaga, que este año inauguró un altar de concreto que se levanta al aire libre, obra recién concluida, gracias a la solidaria contribución de los fieles de la Comunidad san Sebastián de Calle-Calle.

“¿Quieren Ustedes ser ciudadanos del cielo?”. Esta fue la pregunta que resonó en la asamblea y que abrió la homilía del P. Aliaga, instando a los fieles a responder fielmente a la llamada de Dios, al igual que san Sebastián. Luego, hizo alusión a la Creación, a Adán y a Eva. “Adán es nada sin Dios”, dijo, aludiendo a que “adán” leído de atrás hacia delante resulta ‘nada’. Lo propio hizo con la experiencia de Eva, aludiendo a la infidelidad del ser humano para con Dios. “Eva -agregó- leído de atrás hacia delante, se lee ‘AVE’. Eva, y con ella toda la humanidad, encuentra en María su reflejo de fidelidad cuando el ángel la saluda y le dice ¡‘AVE MARÍA’ el Señor está contigo!. Dios nos pide hoy, ser fieles discípulos de su Hijo reflejado en el amor a los demás”, subrayó el religioso.

En Collico, en la Parroquia Nuestra Señora del Carmen, una multitudinaria asamblea concurrió a la procesión que se realizó bordeando el Río Calle-Calle, y que concluyó con la misa presidida por Mons. Ignacio Ducasse, Obispo de Valdivia, quien con palabras de Aparecida, destacó el encuentro con Jesús como la experiencia más grande; como camino necesario a recorrer para revitalizar la fe que a veces se ve debilitada.

Fuente: Comunicaciones Valdivia
Valdivia, 21-01-2009