Felices por la experiencia misionera vivida se mostraron cuatro miembros de la Renovación Carismática de Valdivia: “Aparecida es hoy una realidad en Aysén”.
Motivados por el llamado de Jesús en su Evangelio, con un inconmensurable espíritu misionero y movidos por la necesidad de anunciar a Aquél a quien han conocido y amado, cuatro misioneros dejaron la Región de Los Ríos para adentrarse en las tierras australes de Aysén.
Se trata del matrimonio conformado por Carlos y Ulda Álvarez, junto a los jóvenes Luis Huichicoy y Jaime Silva, todos miembros de la Renovación Carismática de Valdivia. “Venir a la región de Aysén ha sido una gran bendición; es unir pastoral y eclesialmente a Valdivia y Aysén. Estuvimos casi dos semanas en Chile Chico, Ibáñez y Cerro Castillo, y hoy aquí, junto a la Virgen de Lourdes, en la Cascada. La acogida ha sido excelente. Trabajamos con los coros en Chile Chico, reforzamos la pertenencia a la Iglesia desde el Grupo Carismático y la experiencia de fe como asamblea-Pueblo de Dios discípula-misionera; en Ibáñez visitamos enfermos y celebramos con ellos la Eucaristía presidida por el P. Agustín, asesor del Movimiento aquí y en Chile-Chico nos dedicamos a misionar a través de la radio local, una experiencia diferente y muy enriquecedora”, dijo Jaime Silva.
Consultado acerca del llamado realizado por los Obispos en Aparecida a ser discípulos misioneros y la respuesta de los ayseninos misionados, Jaime fue enfático: “¡Sí, la gente tiene sed de Dios! A veces uno se queja de la apatía de la gente, pero es simplemente porque no tienen oportunidades. La respuesta es impresionante, el mismo Retiro que daremos este fin de semana en Coyhaique, en la Obra Don Guanella, ya cuenta con más de 80 personas inscritas y eso es una bendición. La experiencia de Aparecida es hoy una realidad y yo soy testigo de ello”, recalcó.
La experiencia la compartieron en el Km. 32, camino Aysén-Coyhaique, en el sector Cascada de la Virgen, en el marco de la Festividad de la Virgen de Lourdes. Eucaristía que fue presidida por el P. Ivo Solarini, osm., Párroco de Coyhaique, quien instó a los fieles a imitar los valores de la fe, la humildad y fidelidad a la voluntad del Padre, sello de la vida de María, Madre de Jesús y Madre de la Iglesia.
Terminada la Eucaristía, Carlos hizo una especial invitación a los papás. “Queremos invitarlos a todos, en especial a los papás, a compartir juntos este retiro de sanación interior ‘Bienvenidos a la Vida’ para que juntos busquemos la forma de que nuestros hijos también vayan conociendo a Dios. Vivamos esta experiencia de Dios que nos acompaña, que se nos regala y que nos ama a todos con especial predilección”.
Por su parte Ulda, al refreírse a la motivación que tuvo el grupo para realizar esta misión, señaló: “Nuestro gran objetivo y lo que nos anima es el deseo de salir a entregar la Buena Nueva de Dios para que todos nuestros pueblos en El, tengan Vida”.
Luis en tanto, no escondió su emoción: “Estoy muy feliz por la experiencia vivida; esta misión ha sido palpar la obra de Dios. Creo que Dios hace nuevas todas las cosas siempre”, señaló.
Fuente: Comunicaciones Valdivia
[img]http://www.iglesia.cl/breves_new/fotos/20090211_valdivia03.jpg[/img] [img]http://www.iglesia.cl/breves_new/fotos/20090211_valdivia04.jpg[/img]
[img]http://www.iglesia.cl/breves_new/fotos/20090211_valdivia05.jpg[/img] [img]http://www.iglesia.cl/breves_new/fotos/20090211_valdivia06.jpg[/img]
[img]http://www.iglesia.cl/breves_new/fotos/20090211_valdivia07.jpg[/img] [img]http://www.iglesia.cl/breves_new/fotos/20090211_valdivia08.jpg[/img]
Valdivia, 11-02-2009