Fiesta a Nuestra Señora del Carmen festejó la Diócesis de Osorno

Fiesta a Nuestra Señora del Carmen festejó la Diócesis de Osorno

Con la alegría del reencuentro y de volver a la celebración de la Santa Misa en el templo, la comunidad fiel y devota de la Madre y Reina de Chile, festejó la Solemnidad de Nuestra Señora del Carmen con la fiesta del Banquete Eucarístico en la parroquia que lleva su nombre en Osorno, y en la capilla del monasterio Santa María Madre de la Unidad.

 
Domingo 18 de Julio de 2021
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Con el debido control de la temperatura, la entrega de alcohol gel y la distancia propuesta por la autoridad sanitaria entre una persona y otra, la asamblea fue anotándose para ingresar y unirse a la celebración presencial de la Misa en honor a la Santísima Virgen María en la advocación de Nuestra Señora del Carmen.

Tuvo que pasar más de un año para que, la comunidad parroquial pudiera compartir el gozo de encontrarnos nuevamente en la oración “y en nuestra casa, con un motivo tan especial porque hoy justamente celebramos a nuestra Madre Santísima, a nuestra santa patrona”, dijo el padre Mauricio Bello al dar la bienvenida y saludar a la asamblea al iniciar la eucaristía.

En su homilía el sacerdote diocesano destacó la frase “Hagan lo que Él les diga” que la Madre de Jesús le dijo a los hombres en las Bodas de Caná, y “cobra fuerza especialmente en este tiempo de desafíos muy concretos, que tienen que ver con las circunstancias actuales, y uno inmediatamente piensa ¿cuáles son los obstáculos para hacer lo que Jesús nos dice?”.

“El primero es sentir que yo tengo toda la verdad de las cosas, soy el único que entiende lo que sucede a mi alrededor y en el mundo, y por su puesto con esa actitud, dejamos de escuchar a los demás, y dejamos de respetar y construir con los otros. Hoy, más que nunca esta frase la escuchamos, la contextualizamos en lo que vivimos”, explicó el párroco de la comunidad dedicada a Nuestra Señora del Carmen.

También aseguró que para disponer lo que Dios quiere, “lo que es justo, lo que es válido, lo que es verdadero, lo que es mejor, tengo que ir más allá de mis propias visiones”, y añadió que el escribir la nueva Constitución es el primer gran desafío que tenemos como país “y en esa gran tarea no estamos solos, tenemos a nuestra Madre que nos preside en este templo y que nos dice a cada uno de nosotros como católicos: Hagan lo que Él les diga”.

Invitó a la asamblea a pedir la gracia para Chile y especialmente para las personas “que van construyendo, que van tejiendo el bien común, porque todos queremos lo mejor para nuestro país, abrir nuestro corazón, entendimiento para poder construir un Chile mucho más justo, un país de hermanos, donde cada uno se sienta ciudadano y respetado”.

Celebración en Monasterio María Madre de la Unidad
La comunidad de las religiosas Carmelitas Descalzas festejaron la Solemnidad de Nuestra Señora del Carmen, con la Santa Misa que presidió el obispo de la Diócesis de Osorno, monseñor Jorge Concha Cayuqueo.

La asamblea presente, conformada principalmente por familiares de las hermanas del monasterio, participó con alegría de los cantos y del momento de oración, en que el pastor de la Iglesia osornina destacó la devoción de la Virgen del Monte Carmelo, y cómo fue María quien se manifestó a los hombres que se encontraban en dicho lugar.
“Todos necesitamos subir a la montaña” señaló el obispo, y explicó, “que es una figura, figura de la búsqueda de Dios. Subir, significa dar pasos, cansancio también, disponerse o salir de la rutina, a veces la rutina es buena, pero quienes desean este encuentro con Jesucristo también hacen algo extraordinario”, agregó el obispo.

Aseguró que la Madre de Jesús, la Santísima Virgen María “siempre ha facilitado este encuentro con el Padre, a través de su cercanía, de su presencia. El gran signo que hizo el Señor en las Bodas de Caná fue por intervención de Ella, intervención como signo vivo y verdadero en nuestras vidas”.

“Son muchas cosas que hacen ´agua´ la fiesta de la vida entre nosotros, cosas que están en el corazón de cada uno, otras que están en nuestra forma de vida, muchas que están en las estructuras, en nuestra sociedad. El pecado personal, las formas injustas de relacionarnos habla de un desafío o una necesidad de transformación enorme, de crecer en justicia y fraternidad entre nosotros”, agregó.
“Falta mucho crecer en el reconocimiento en muchas instancias de la vida personal y colectiva”, añadió y enfatizó que “el reconocimiento de lo propio es muy importante, y para ello es imperioso comenzar con el reconocimiento de los orgullos y la soberbia que hay en el corazón de cada uno, de lo contrario seguimos centrados en nosotros mismos, lo que impide abrirnos y reconocer a los demás y lo que hay de bueno en ellos”.

“Sólo así hay posibilidad de diálogo, de perdón y reconciliación. Este ejercicio tan necesario como volver a nacer en nosotros, sólo será auténticamente mejor si va dando cabida a la búsqueda auténtica de Dios, de su voluntad, de su querer, de su proyecto para cada uno y para todos (…) Que María Santísima, a quien recordamos con amor, con gratitud en este día nos ayude en esta tarea, en este ejercicio de vida cristiana”, aseveró.

Al finalizar la celebración de la Eucaristía, el obispo bendijo los escapularios que las religiosas prepararon para la fiesta de Nuestra Señora del Carmen, los cuales fueron repartidos entre la asamblea presente, por la Priora del Monasterio María Madre de la Unidad; hermana Silvia del Inmaculado Corazón de María.

Fuente: Comunicaciones Osorno
Osorno, 18-07-2021
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