Con un llamado a la misericordia y la paz, se realizó una Misa de desagravio en el lugar donde se encontraba la Capilla Santa María del Camino de Vilvilco, que resultó destruida por un ataque incendiario.

La Eucaristía, celebrada al mediodía de este sábado 26 de agosto, fue presidida por el Obispo Auxiliar de Concepción y Vicario Episcopal de Arauco, Monseñor Oscar García, junto al Párroco de Nuestra Señora del Carmen de Cañete y Tirúa, Padre Gilberto Matuz; el Padre Carlos Bresciani, sacerdote Jesuita de Tirúa; y el Párroco de Santa Rosa de Lima de Lebu, Padre Hernán Llancaleo. Y contó con la presencia de fieles tanto de la comunidad como de sectores aledaños, de la zona rural y urbana de Cañete.

En su homilía, Monseñor Oscar hizo alusión a las bienaventuranzas, recordando que son bienaventurados los que trabajan por la paz, porque de ellos es el Reino de los Cielos, al igual que son bienaventurados los perseguidos por su causa. En ese contexto, señaló que más allá del sinsabor, de la inseguridad y de la impotencia, “el amor derrumba la barrera del odio”.

El Vicario Episcopal de Arauco les contó su experiencia personal, ya que también ha sufrido la quema de capillas, y afirmó que conoce profundamente lo que ellos están viviendo, “pero lo importante es no perder el norte, que nuestros principios y valores no se negocian y hay una diferencia cuando realmente los ponemos en práctica”.

“El no juzgar, no condenar, más allá de las diferencias que pueda haber a veces hasta de pensamientos, tenemos que tener siempre la mirada en alto y vivir como decimos creer, manifestarlo con la vida, con las acciones concretas”, enfatizó.

Además, señaló que “el hombre y la mujer de paz, de esa paz que viene de Cristo, es capaz de irradiar también la serenidad a pesar de las dificultades y a pesar del momento y la situación”.

En ese sentido, destacó que en las personas con las que se había encontrado tanto en los días anteriores como en ese día “me di cuenta de que realmente había mucha serenidad y mucha paz”, por lo que felicitó a los miembros de la comunidad y los animó a no perder esa paz.

Monseñor Oscar dijo que las cosas están en manos del Señor, manifestó su confianza en que ayudará a la comunidad a salir adelante y nuevamente los llamó a no perder la paz pese a las dificultades, citando las palabras de Jesús: “No pierdan la paz, Yo he vencido al mundo”.

Además, invitó a los miembros de la comunidad a ser solidarios entre ellos y con los demás, “a través de la oración, la cercanía, el afecto. Y también, en la medida de lo posible, tender la mano para las necesidades materiales que puedan tener”.

El Vicario Episcopal de Arauco animó a tener “siempre la esperanza viva, una esperanza centrada en la persona de Jesucristo” y a rezar “por quienes no piensan igual que nosotros, ponerlos en las manos del Señor. Sin lugar a dudas, Él con nuestra humilde oración, pero también con una fe sólida, puede tocar su corazón y convertirlo”.

En ese sentido, precisó que siempre han de tener altura de miras y “no juzgar ni condenar, sino que ser proféticos también en estas horas difíciles en la comunidad (…) en lo que se ha vivido como parroquia y como zona”, pues han habido otros atentados, que sin lugar a dudas generan mucha incertidumbre e inseguridad.

Finalmente, animó a la comunidad a permanecer “firme en la huella, para que no pierdan la fe y la certeza de que Dios obra en todo momento y circunstancia, y siempre desea encontrar un corazón que lo refleje. Él es el pacífico por excelencia, aquel que nos mostró cómo actuar con misericordia, sirviendo desinteresadamente a los hermanos, con humildad y sencillez, porque eso posibilita abrir caminos y llegar a los corazones”.

Recordemos que la Capilla Santa María del Camino, perteneciente a la Parroquia Nuestra Señora del Carmen de Cañete y Tirúa, tenía capacidad para 80 personas y además de ser utilizada por la comunidad católica del sector, el espacio también era ocupado por la Junta de Vecinos, agrupación de adultos mayores, comités de agricultores, comité de agua y organizaciones territoriales.

Fuente: Comunicaciones Concepción
Concepción, 29-08-2023