“La liturgia del Adviento se enriquece con la solemnidad de la Virgen Inmaculada. La gracia de su limpia e inmaculada Concepción anticipa las promesas de Dios y anuncia la futura llegada del Mesías, porque en ella ya actúa la gracia del Redentor”, expresó Mons. Ignacio Ducasse Medina, Arzobispo de Antofagasta, quien presidió la Eucaristía.

El Arzobispo también manifestó: “la fiesta de la Inmaculada Concepción es el día de celebrar nosotros que el don de Dios precede a todo, que Él ‘nos eligió antes de crear al mundo’, ‘nos amó primero’ y que estamos llamados a decir ‘sí’, o ‘hágase en mí’, a esa orientación primordial en cada nueva situación. Hoy es la fiesta de la fidelidad, de su permanencia y la nuestra en el ‘sí permanente’ a lo iniciado por Dios en nosotros”.

Además Mons. Ducasse mencionó: “no nos cansemos de contemplar a María, para que también en nosotros, al final, permanezca el designio inicial de Dios, recordado en cada Adviento: ‘ser santos e inmaculados ante Él por el amor’”.

Finalmente Mons. Ducasse realizó la bendición a la imagen de la Virgen, la cual recorrió en vehículo algunas calles de la ciudad y sedes de los Bailes Religiosos, culminando alrededor de las 21:00 horas en la parroquia Inmaculada Concepción.

Fuente: Comunicaciones Antofagasta
Antofagasta, 08-12-2020